Los “Godínez” han ganado mucha popularidad desde hace algunos años, ya que el trabajo se ha convertido en el lugar donde la mayoría pasa más horas del día, incluso que en casa. Sin embargo, el sedentarismo en la oficina, la mala postura en el escritorio y pasar muchas horas frente a la computadora podrían deformar tu cuerpo y el ejemplo de esto es Emma, una muñeca creada tras un estudio en el que se analizaron las condiciones laborales y su impacto en la salud.
Emma tiene el cuerpo de un oficinista que lleva muchos años en un espacio de trabajo inadecuado, resalta su espalda inclinada hacia atrás de manera permanente, lo que hace que su cabeza y cuello estén hacia el frente y dan la impresión de que tuviera una “joroba”.
Sus piernas presentan várices causadas por el flujo sanguíneo deficiente tras estar muchas horas sentada. Estas pequeñas venas visualmente no son agradables para las mujeres, pero además provocan comezón y molestias físicas.
Emma tiene una panza abultada, también generada por la falta de actividad física en la oficina y por la mala alimentación, ya que por el estilo de vida acelerado los “Godínez” terminan comiendo en restaurantes de comida rápida o consumen muchos refrigerios a lo largo del día en la oficina.
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Los ojos de esta muñeca muestran otro de los problemas que afectan a este sector de la población, el síndrome de ojo seco que causa que se vean de color rojo, estén irritados y con lagrimeo, todo debido a pasar mucho tiempo frente al monitor de la computadora o del celular.
Pero eso no es todo. Emma también tiene los tobillos y las muñecas hinchadas por el movimiento repetitivo que realiza en su espacio de trabajo, así como piel cetrina (de un tono amarillento o verdoso) a causa de la luz artificial y vellos en la nariz y las orejas por la mala calidad del aire. Además, la muñeca “Godínez” presenta eczema en sus brazos a causa del estrés y tiene los antebrazos y piernas rojos por el calor de la computadora.
Emma fue creada con base en los resultados del informe The Work Colleague of the Future, que fue realizado por expertos en salud dirigidos por William Higham. En este estudio se encuestó a 3 mil oficinistas, quienes dijeron que pasan un promedio de seis horas sentados en su escritorio, mientras que siete de cada 10 toma algún medicamento para contrarrestar los malestares que tiene la muñeca.
En el estudio, los especialistas destacan que “pasamos regularmente horas en nuestro escritorio con poco movimiento y nuestros cuerpos se están atrofiando en respuesta. Se aceleran desórdenes musculoesqueléticos y las extremidades se vuelven más débiles, se forman coágulos de sangre, se presentan enfermedades del corazón, diabetes e incluso cáncer”.
Por eso los investigadores recomiendan cambiar los ambientes laborales y hacerlos más positivos y saludables, permitiendo que los trabajadores tengan más movimiento y cuenten con asientos y espacios ergonómicos que no dañen su cuerpo. Indican que ya es muy tarde para Emma, pero aún es buen tiempo para evitar que esto nos suceda a todos los Godínez, ¿tú qué opinas?