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¿Por qué es importante dar abrazos a los niños? 7 razones

Dar abrazos a los niños favorece su buen desarrollo físico y mental y también tiene beneficios para los adultos

Escrito en SOY MAMÁ el

Los abrazos son una muestra de cariño y también un elemento básico de comunicación, incluso se ha demostrado que tienen muchos beneficios para la salud, especialmente en los pequeños. ¿Por qué es importante dar abrazos a los niños? Te sorprenderán todas las razones.

Aunque es un acto sencillo, el simple hecho de recibir abrazos con frecuencia puede marcar una gran diferencia en el desarrollo físico y emocional de un niño.

(Foto: Pixabay) 

Por ello, es importante que en casa no falten los abrazos hacia los pequeños, pues se ha demostrado que tienen muchos beneficios, de los cuales te contaremos a detalle en los siguientes párrafos.

Importancia de dar abrazos a los niños

Los abrazos y los besos son las primeras muestras de afecto que perciben los seres humanos, pues desde que somos bebés, es común recibirlas. Pero lo que pocos saben, es que algo tan sencillo como rodear a un pequeño con los brazos puede aportar muchas ventajas en su desarrollo, como:  

1. Comprenden mejor su entorno

Para los niños, el mundo tiene significado por medio de la interacción y ésta no puede producirse sin determinadas muestras de afecto como los abrazos.

(Foto: Freepik) 

Cuando un pequeño percibe el afecto de otros, crea un sentido de propósito que le ayuda a dar significado a la información que percibe del entorno. El abrazo es su mejor refugio y apoyo.

2. Vínculo y apego sano

Abrazar es otro modo de comunicación y un artículo publicado en El País señala que dar esta muestra de cariño desde que los niños son muy pequeños ayuda a fortalecer el vínculo y el apego sano y seguro.

La conexión emocional por medio del consuelo físico en momentos complicados de sus vidas los hace sentir protegidos del mundo. Como consecuencia, tendrán la necesidad y el coraje de explorar y enfrentarse a cada situación que se les presente.

(Foto: Freepik) 

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3. Se regulan las emociones

Muchas veces los niños sienten frustración, enojo o tristeza y es el momento perfecto en que se les debe dar un abrazo.

Esos son los abrazos de contención, mediante los cuales se transmite seguridad, protección, empatía y ternura. Es una forma de acompañarlos en el proceso de aprendizaje, lo que les permite convertirse en personas seguras y resilientes.

4. Es una gran terapia para los padres también

Abrazar es un acto recíproco, por lo que el adulto que abraza al niño también recibe el afecto y los beneficios. Los abrazos aportan energía, fuerza y motivación para ambos, por ello, cuando se toma entre los brazos a los pequeños, hay una conexión con uno mismo, lo que genera gran satisfacción.

5. Incrementa la autoestima

Dar abrazos a los niños favorece una buena autoestima en ellosporque les aportan las fuerzas necesarias para enfrentar de forma eficiente los momentos dolorosos y estresantes de la vida. Sienten que tienen un apoyo y que sin importar nada, habrá alguien dispuesto a sostenerlos si tropiezan.

6. Conexión entre neuronas

Cada interacción física es una nueva experiencia y hace que el niño se tenga que familiarizar con algo, lo que significa tener nuevos estímulos. Esto, en términos físicos, se traduce como más conexiones entre neuronas que fomentan el desarrollo y el aprendizaje.

(Foto: Pixabay) 

7. Son más felices

Con los abrazos se libera oxitocina en el cerebro, que es la hormona de la felicidad y el bienestar. Esta hormona también es fundamental para las relaciones sociales y los lazos emocionales, pues favorece la sensación de alegría, plenitud y menos ansiedad y estrés.

Como ves, dar abrazos a los niños tiene muchas ventajas no solo para ellos, sino también para los adultos, así que siempre que puedas, procura dar esta muestra de afecto, especialmente cuando los pequeños pasen por un momento difícil.

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(Con información de El País y Guía Infantil)