Una cosa que sabe cualquier deportista es la obligatoriedad de alimentarse adecuadamente para sentirse sano y preparado para la práctica deportiva. Aunque el tipo de alimento y las cantidades recomendadas varían en función de cada deporte (atletismo, natación, escalada) y de cada persona, existen una serie de recomendaciones generales que deberían seguir las dietas de los deportistas, puesto que ayudan a mejorar su bienestar físico y mental.
Mejor dieta para deportistas
-Minerales. Dos de los minerales fundamentales para las personas que practican ejercicio asiduamente son el calcio y el hierro. El primero ayuda a fortalecer la estructura ósea mientras que el segundo es el responsable de transportar el oxígeno hasta los músculos.
Para obtener el calcio necesario es recomendable consumir derivados lácteos como, por ejemplo, leche semidesnatada, yogur o queso. En el caso del hierro, la mejor forma para alcanzar o mantener unos niveles adecuados es consumiendo carne con muy poca grasa, pescado, verduras de hoja verde y cereales enriquecidos con este mineral.
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-Hidratos de carbono. Los hidratos de carbono es el mejor combustible que un deportista puede encontrar. Por esta razón, es aconsejable consumir alimentos ricos en ellos.
Algunos de estos alimentos son las frutas, las verduras, las hortalizas y los cereales, especialmente aquellos integrales integrales como el arroz o la avena integrales o el pan elaborado con harinas también integrales. Estos cereales no solo aportarán a cada deportista los hidratos de carbono necesarios, sino que también mejorarán sus niveles de fibra, así como de otros nutrientes.
-Un poco de grasa. Muchas personas tienden a pensar que la grasa es la principal enemiga de cualquier deportista. Con todo, los deportistas necesitan incorporar algunos alimentos grasos a su dieta diaria, ya que precisan quemar grasa para tener una energía más duradera en el tiempo.
No obstante, no vale cualquier tipo de grasa, sino solo aquellas consideradas sanas, es decir, fundamentalmente grasas insaturadas. Los aceites de origen vegetal, algunos pescados, los frutos secos y las semillas son algunos de los alimentos que contienen este tipo de grasas.
-Miel. La miel es uno de los alimentos más beneficiosos para el organismo, tanto para el de los deportistas como para el de cualquier persona. De hecho, los médicos recomiendan consumir entre tres y cinco cucharadas de miel al día, puesto que una dosis superior puede conllevar en algunos casos efectos adversos para el organismo.
Entre las propiedades de la miel destaca su capacidad para regular el azúcar en sangre y para reducir el estrés metabólico, que es la traducción corporal del estrés emocional o psicológico. Asimismo, la miel también ayuda en la regulación diaria del sueño, combate el estreñimiento y mejora la función cerebral.
-Huevos. Además de los grupos alimentarios anteriormente señalados, los huevos son, junto la miel, otro de esos alimentos básicos en la dieta de cualquier deportista, puesto que constituyen una gran fuente de proteína. Sin embargo, no es aconsejable comer más de cuatro o cinco huevos a la semana.
Entre las propiedades del huevo sobresalen, entre otras, la estimulación de la síntesis de las proteínas musculares, lo que sin duda constituye un aspecto muy positivo para el organismo de los deportistas. Además, los huevos también fortalecen el sistema inmune, así como el esqueleto y los dientes.
-Hidratación. Junto con una buena alimentación, la hidratación es un aspecto fundamental para las personas que realizan ejercicio físico constante. Una posible deshidratación puede empeorar significativamente el estado físico de un deportista, perjudicando tanto su práctica como su rendimiento.
Por este motivo, los deportistas deben garantizar su hidratación en todo momento. Así, aunque cada deportista deberá beber el volumen de agua que necesite en función del tipo de deporte que practique, de su condición física y de las condiciones ambientales, se aconseja que durante la práctica deportiva, se consuma agua cada 15 o 20 minutos.
-Cafeína. La cafeína es, al contrario que los anteriores, un componente químico que los deportistas deberían evitar, debido a sus propiedades diuréticas. De este modo, un consumo excesivo de cafeína hará que la persona orine con mayor frecuencia, aumentando sus posibilidades de deshidratación.
Además, la cafeína provoca un aumento de la frecuencia cardíaca y de la tensión arterial, ambas estrechamente vinculadas con la aparición de ansiedad y de trastornos del sueño. De este modo, al evitar un consumo elevado de cafeína, el deportista también se asegurará un estado físico más tranquilo y la posibilidad de alcanzar un mayor nivel de rendimiento.
-Evita los suplementos. En la medida de lo posible, es recomendable evitar los suplementos, ya que no tienen porque tener efectos positivos siempre. Los esteroides anabólicos, por ejemplo, pueden llegar a causar alopecia en el caso de los hombres (afección que ocasiona parches redondos de pérdida de cabello y luego calvicie total) e hirsutismo en el de las mujeres (crecimiento excesivo de vello oscuro y grueso).
Asimismo, los comprimidos de sal que mucha gente consume para evitar la deshidratación tampoco son recomendables. En algunos deportistas, se ha encontrado relación entre su ingesta y posibles deshidrataciones.
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