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¿Personas o personalidades difíciles? Cómo tratar con la plaga de la sociedad

Lidiar con las personas no es tarea fácil y menos si existen diversos tipos de personalidad que van desde las limítrofes, narcisistas, histéricos, depresivos y hasta las psicopáticas.

Escrito en MENTE SANA el

Ante la problemática existencial que enfrenta la sociedad actual, siempre debes de estar preparado para saber manejar las situaciones con estas personalidades. El encontrar la forma correcta de cómo tratar con personas difíciles puede resultar toda una odisea.

Este tipo de personas conflictivas pueden encontrarse en diferentes contextos, ya sea en el trabajo, en reuniones familiares, con amigos e incluso hasta con desconocidos en la calle. La mayoría de las veces, terminas en medio de una discusión sin sentido y se pierde el objetivo inicial.

Lo importante es aprender a identificar a las personas difíciles desde un primer momento, para que puedas tomar precauciones sobre lo que debes decir o hacer. Este es el secreto para saber cómo tratar con personas difíciles o autoritarias siempre que se te presenten.

Recuerda, no solamente se trata de alzar la voz o llegar a resoluciones precipitadas. Para saber cómo tratar a las personas difíciles que te rodean, es más una cuestión de saber gestionar correctamente las emociones, marcar límites a tiempo, ser asertivos y siempre mantener el respeto.

¿Señales de alarma para identificar a una persona difícil?

De acuerdo con el Instituto Nacional de Psiquiatría una persona difícil es aquella persona que vive su propia realidad y que pocos se atreven a enfrentar y decirles que están equivocados.

Estos 5 rasgos son los más característicos que identifican a una persona difícil:

  • No muestra ningún interés por resolver sus conflictos.
  • Suelen ser emocionalmente inestables.
  • Te echan la culpa cuando las cosas no salen bien.
  • Se ofenden con mucha facilidad.
  • Actúan desde el miedo por aquello que no pueden controlar.

Estas son las principales características de una persona difícil que debes conocer para poder identificarlas. Únicamente es cuestión de prestar atención a cómo te sientes cada vez que terminas de hablar con ellos.

Por lo general, al momento de tratar con personas difíciles sueles terminar sintiéndote cansado, molesto, con frustración e incluso enojado. Este es un gran indicio de que estabas conversando con una persona complicada.

Por otro lado, también debes estar alerta de otro tipo de efectos que se pueden producir, como la tensión muscular y la elevación del estrés o, simplemente, esa sensación de intranquilidad que aparece cada vez que estás cerca de esa persona, entonces ese es un caso de personas difíciles a la vista.

Foto: Freepik

¿Técnicas infalibles para tratar con personas difíciles y problemáticas?

Robert Bramson, autor del libro Tratar con Gente Difícil, recomienda algunas técnicas para lidiar con los diferentes tipos de personas difíciles que puedes encontrar en diferentes contextos:

Dales un espacio para hablar

  • Aquí aplica el beneficio de la duda, en ocasiones, las personas difíciles no lo son en verdad. Recuerda, siempre hay un detrás y un por qué.
  • Si ya hablaste con esa persona lejos de un momento de mucho estrés o por alguna cuestión personal que salió a flote y sigue incomodando es necesario que marques tu distancia y pongas tu límite
  • Para esto, Bramson aconseja que, para saber cómo tratar con personas difíciles, se haga un análisis de su comportamiento. Si la situación conflictiva se repite al menos en tres ocasiones, entonces se habla de un mal hábito de las personas difíciles y no de algo circunstancial.
  • En el caso de que este problema se esté dando dentro del entorno laboral, dirígete con los jefes o las personas responsables a cargo, siempre debe de existir un antecedente de aviso. Las personas difíciles dentro del entorno laboral se mantienen a través de escenarios conflictivos y son los que siempre están señalando hasta el mínimo detalle del resto de sus compañeros sin entregar realmente resultados

Aprende a escuchar

  • De la mano del punto anterior, para aprender cómo tratar con personas difíciles, no sólo es permitirles decir todo aquello que les molesta, también es importante prestarles atención a lo qué dicen, mas no cómo lo dicen.
  • De esta forma, evitarás tomarte el conflicto como algo personal, además lograrás destacar por hacer uso de tus habilidades de trabajo en equipo.
  • Para aprender a cómo tratar con personas difíciles, saber escucharles es fundamental, pues, si finges empatía también puedes alimentar la discusión y ese no es el objetivo. Lo más seguro es que al escuchar con atención, podrás identificar rápidamente cuál es la verdadera razón de su incomodidad.

Mantén la calma

  • Una de las características de las personas difíciles es, precisamente, su falta de calma, es decir, su irritabilidad e inestabilidad emocional, lo que los lleva a emitir respuestas un poco agresivas y que pueden dañar al resto.
  • No obstante, una clave para tratar a las personas conflictivas es no perder la compostura y pensar antes de dar una respuesta. Para ello, es importante poseer las características básicas de una persona asertiva, ya que eso te ayudará a no perder el control de la situación.
  • Además, mantener la calma en medio de los conflictos es fundamental para saber cómo tratar con personas difíciles, esto te permitirá pensar con mayor claridad y podrás ayudar a la otra persona a darse cuenta de su actitud o, en todo caso, puedas poner distancia entre la otra persona y tú.
  • Cuál es la mejor forma de hacerlo, respira. Ya sea que lo hagas contando hasta 10, 100 o mil. Mantener tu respiración lenta y pausada te ayudará mucho, te permitirá aprender de primera mano a cómo tratar con esas personas que únicamente necesitan atención.

Respeto, ante todo

  • Es necesario comprender a la otra persona, pero eso no significa que permitas que te maltraten o te humillen. Tampoco se trata de que seas tú quien tenga que asumir la responsabilidad de la situación.
  • En el caso de que hayas podido cometer un error, lo mejor es evitar agrandar el problema, ya que las personas difíciles suelen tomarse las cosas de manera muy personal. En todo caso, lo que podrías hacer, es esperar a que ambas partes se calmen y pedir disculpas.

Los límites, clave para lidiar con personas difíciles

  • Ser asertivo y empático te permitirá reconocer hasta dónde llega tu responsabilidad y desde qué punto es necesario que la otra persona pueda dar de su parte para llegar a una solución. Esto es un pilar fundamental para saber cómo tratar con personas difíciles.
  • Es decir, puede que seas sumamente empático, pero eso no significa permitirle a la otra persona que te alce la voz por cuestiones que no son tu responsabilidad. La recomendación de psiquiatras y psicólogos especialistas para saber cómo tratar con personas difíciles, es:
  • Preguntarles por una o varias soluciones para su problema.
  • También, respetuosamente recordarles lo que no vas a permitir.

Sé consciente de ti

  • Un elemento para saber cómo tratar con estas personas complicadas es que, además de estar consciente de tu respiración y ser respetuoso, está el hecho de ser consciente y responsable de tus propias emociones.
  • Por eso, es importante que te preguntes cómo tratar con personas difíciles desde tu posición. Así, evitarás involucrarte de más en conflictos innecesarios y hallar soluciones de forma más rápida.

Descansa bien

  • Es bien sabido que, si no duermes bien, puedes estar irritable durante el día, pero eso no significa que los demás tengan la culpa de tu estado de ánimo.
  • Una vez que aprendes a cómo tratar con personas difíciles también implica fortalecer las competencias conocidas como habilidades, que no solamente te servirán para agradarle más a las personas que te rodean, sino también, poder mejorar tus habilidades para resolver conflictos o llegar a soluciones.

Utiliza toda tu empatía

  • Seguramente estás de acuerdo que uno de los principios básicos que falla y detona el conflicto es la falta de empatía.
  • No se trata de que seas amigo de todos.
  • No es necesario.
  • Pero sí lo es comprender.

Muchas veces, se suele calificar rápidamente a alguien como una persona difícil, pero en ocasiones su comportamiento ni siquiera tiene que ver contigo. La raíz de su conducta puede ser por problemas personales, traumas en su niñez, por no poseer las habilidades que tú, por la falta descanso o simplemente está demasiado estresado.

Ahora que ya sabes cómo tratar con personas difíciles, ahora es tu turno de poner en acción todas estas herramientas que te hemos ofrecido.

Estas técnicas no solamente te ayudarán a manejar personalidades conflictivas, sino que también te ayudarán a ser un buen líder y establecer relaciones cordiales con todos aquellos que te rodean, sobre todo en entornos laborales, donde puedes estar expuesto a situaciones estresantes.

Foto: freepik

¿Cuántos tipos de personas difíciles existen?

Así como todas las personas son distintas, también las personas difíciles lo son. Aunque algunas comparten características similares, existen técnicas generales que te pueden servir para poder tener una mejor convivencia con ellos.

Para poder entender los diferentes tipos de personas difíciles que hay, es necesario explorar cuáles son aquellas personalidades que representan el conjunto de actitudes poco saludables y que van contra las normas sociales.

  • Personalidad agresiva. Violentas, obsesionadas con la oposición, desafiantes, normalmente son irritables, pierden el control rápidamente, carecen de empatía y les cuesta mucho escuchar la opinión de los demás. No son racionales.
  • Personalidad pasivo agresiva. Tienen una ira contenida. No aspiran a la resolución de un conflicto, sino que dificultan el hallar una solución. Son tercas y no cambian de opinión, aunque saben perfectamente que están mal. Existe una desconexión constante entre lo que dicen y lo que hacen.
  • Personalidad negativa. Suelen quejarse para llamar la atención. Se quejan de todo, menos de ellos mismos, ya que no realizan un autoanálisis de su propia persona. Se toman todo muy personal, les gusta ponerse en el papel de víctima y siempre pretenden tener la razón.
  • Personalidad egoísta. Se interesan por sí mismas, no tienen respeto ni interés por las necesidades del resto. Le gusta sacar provecho de la situación y necesita sentirse constantemente elogiado y admirado. Por otro lado, son muy sensibles a las críticas, debido a que se toman las cosas a un nivel extremadamente personal.
  • Personalidad procrastinadora. Buscan postergar todas sus actividades y eso se debe a su miedo al fracaso. No son flojas, sino que es un tema de la falta de manejo de las emociones. Prefieren no salir de su zona de confort, sin embargo, su comportamiento termina afectando a los demás miembros del equipo.
  • Personalidad indisciplinada. No siguen las reglas. No pueden establecer prioridades, ya que tienen poco orden y hay una falta total de compromiso que termina afectando a los demás miembros del equipo. Son impuntuales, no respetan a la autoridad y suelen hablar mal de otras personas cuando no están presentes.
  • Personalidad infantil o inmadura. Inestables emocionalmente, no aceptan responsabilidades, son impulsivas, tienen la necesidad de ser el centro de atención y no reconocen sus errores. No les gusta asumir responsabilidades, es por eso que en entornos laborales no suelen recibir ascensos o cambiar de puestos de trabajo. Les cuesta salir de su zona de confort.

¿Por qué las personas difíciles son una plaga en la sociedad?

Cuántas veces te has enfrentado ante personas complicadas que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud han sido denominada como plaga social porque no están dispuestos a hacerse cargo de sí mismas y asumir su responsabilidad, y siguen una rutina diaria sin pedir la ayuda profesional necesaria.

Foto: Canva

Recuerda, vivimos entre el ansioso que transmite su estrés, el paranoico que se ofende al menor comentario, el obsesivo que se pierde en los detalles, el narcisista que siempre piensa en sí mismo, el depresivo cuya inercia desarma y desespera, el hiperexigente para el que nunca nada será suficiente.

Existen multitud de personalidades difíciles que pueden perturbar o incluso destrozar tu vida cotidiana. La vida sería mucho más fácil si todo el mundo estuviera siempre de buen humor, relajado y atento a los demás. Incluido tú mismo.

Pero como esto no ocurrirá nunca, vale la pena aprender a convivir con los aspectos más complicados de la personalidad humana.

Además de proporcionarte todas estas herramientas para aprender a lidiar con todo tipo de personas, también te recomendamos el libro, Cómo tratar con personalidades difíciles, de Christophe André y François Lelord.

(Con información de BBC y el Instituto Nacional de Psiquiatría)