¿Cuál es la efectividad de un cubrebocas casero y de las caretas protectoras?, ¿cuál ofrece mayor protección en la pandemia? Ante la recomendación del uso de cubreboca como una medida para evitar la propagación de la covid-19, enfermedad causada por el nuevo coronavirus, uno de los cuestionamientos más frecuentes es la efectividad de este, relacionada con los materiales para su elaboración. Por otro lado, el uso de caretas protectoras también ha sido cuestionado y los investigadores de la Universidad de Florida Atlantic, han trabajado con simulaciones para probar su efectividad, ¿qué encontraron?
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¿Cuál es la efectividad de los cubrebocas caseros?
Como refiere información de la Organización Mundial de la Salud (OMS) el uso de mascarillas o cubreboca forma parte de un conjunto integral de medidas de prevención y control que pueden limitar la propagación de diversas enfermedades respiratorias como es el caso de la covid:
“Sirven también para proteger a las personas sanas cuando las emplean al entrar en contacto con una persona infectada o para el control de fuentes si una persona infectada la utiliza para no contagiar a otros”.
Al respecto, algunas personas han elaborado cubrebocas caseros para protegerse contra la propagación de covid-19 y una investigación realizada por la Universidad de Illinois en Urbana- Champaign, examinó la eficacia de las telas domésticas comunes para bloquear las gotículas respiratorias.
Respecto a la reciente investigación, Taher Saif, profesor de ciencias mecánicas e ingeniería dijo:
“Nuestro objetivo es mostrar que muchas telas comunes aprovechan la compensación entre la transpirabilidad y la eficiencia de bloquear las gotas, grandes y pequeñas”.
El equipo de investigadores probó la transpirabilidad y el bloqueo de gotas de 11 tejidos domésticos comunes como:
- Prendas de vestir nuevas
- Telas acolchadas
- Prendas de vestir usadas
- Trapos de cocina
- Sábanas.
¿La tela más eficaz?
Saif explica que la parte fácil fue probar la transpirabilidad de los tejidos pues se midió la velocidad del flujo de aire a través de la tela, pero lo complicado fue probar la capacidad de bloqueo de gotículas:
"Contamos el número de nanopartículas que aterrizan en el plato usando un microscopio confocal de alta resolución. Luego usamos la proporción del número recolectado con y sin la tela para darnos una medida de la eficiencia de bloqueo de gotas".
En el informe publicado en la revista Extreme Mechanics, la investigadora señala que las gotículas al toser, hablar y estornudar tienen velocidades en un rango de 10 a 40 metros por segundo y que, con dos o tres capas, incluso de las telas más permeables, como la tela de una camiseta, logran una eficiencia de bloque de gotas similar al de una mascarilla médica, mientras mantienen una transpirabilidad comparable o mejor:
"Descubrimos que todas las telas probadas son considerablemente efectivas para bloquear las partículas de 100 nanómetros transportadas por gotículas de alta velocidad similares a las que pueden liberarse al hablar, toser y estornudar, incluso con una sola capa".
¿Cubrebocas o caretas? He ahí la cuestión...
En el caso de las caretas protectoras, los investigadores de la Universidad de Florida Atlantic realizaron una simulación de lo que ocurre cuando una persona habla, tose o estornuda mientras se utiliza un cubreboca, careta protectora y cubrebocas con válvulas y encontraron:
“Las caretas bloquean inicialmente la inercia del estornudo, pero las gotículas salen por abajo y se liberan en el aire”.
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Lo anterior significaría que los cubrebocas caseros sí son efectivos para evitar la propagación del nuevo coronavirus pues, en general, los cubrebocas han demostrado ser la mejor opción para contener las gotículas, comparado con las caretas protectoras de plástico que hacen muy poco para contener la propagación de partículas microscópicas en el aire.