No es la primera vez que se dice, pero científicos de la Universiad de Berkley, en California, vuelven a confirmar que hablar de los demás en son de chisme es bueno para la salud.
De acuerdo con la investigación lidereada por Robb Willer, profesor en Psicología y Sociología, contar un chisme o escucharlo nos ayuda a mantener el orden social y reduce el estrés, especialmente si se habla del mal comportamiento de una persona.
El investigador señala que dar difusión a información sobre una persona que no tuvo un buen comportamiento, hace que la gente se sienta mejor, esto trae como consecuencia que se reduzca la frustración por lo que produjo el chisme.
Los datos de esta investigación fueron posibles gracias al trabajo de 300 personas que fueron reclutadas a través del sitio de internet de anuncios y contactos Craiglist, a quienes se les pagó 50 dólares.
De cada participante se evaluó su generosidad y de acuerdo con las conclusiones, que incluyen chismorreos sobre algunos de los propios voluntarios, se difundieron más chismes sobre las personas que resultaron menos generosas.
El estudio determinó que hay una forma de chismear, llamada "prosocial", porque critica la explotación y la deshonestidad.
Según el investigador Willer, cuando somos testigo de la mala actitud de una persona, nos sentimos frustrados y al ser capaces de contar el hecho a otros, nos sentimos mejor. De esta manera, explica, se mantiene el orden social. El estudio considera que sin los chismes el orden social nos generaría una gran frustración.
(Con información de 20minutos.es)
Viernes 26 de abril de 2024