Cada año surgen alrededor de 18 millones de casos nuevos de cáncer en el mundo, por lo que la creación de terapias que ayuden a la recuperación de los pacientes oncológicos es esencial para salvar millones de vidas afectadas por esta enfermedad.
Debido a ello, se ha utilizado la inmunoterapia como una modalidad terapéutica potencial para el tratamiento del cáncer. A través de ella se busca estimular las defensas naturales del cuerpo y que éstas combatan los tumores cancerígenos.
Una de las estrategias de inmunoterapia más atractivas hasta ahora desarrolladas es la vacunación contra el cáncer, con las que se busca incentivar la respuesta de las células T como una acción inmune ante la enfermedad oncológica.
Por lo anterior, científicos del Instituto de Ingeniería de Procesos de la Academia de Ciencias de China, desarrollaron una nueva vacuna terapéutica contra tumores cancerígenos, la cual fue calificada como de “alto rendimiento” para combatir el cáncer.
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Esta vacuna contra tumores está compuesta de microcápsulas de ácido poliláctico autocurativas, las cuales pueden inhibir el desarrollo desarrollo de tumores e incluso evitar la evolución del cáncer a uno metastásico.
“Se logra una respuesta eficaz de las células T, una potente inhibición tumoral, efectos antimetastásicos y prevención de la recurrencia posquirúrgica con varios tipos de antígenos…”
Los autores de la investigación publicada en Science Advances ya habían trabajado previamente en el desarrollo de vacunas contra el cáncer, las cuales resultaron efectivas para combatir tumores cancerígenos como el linfoma, el melanoma y el cáncer de mama.
Sin embargo, dichas vacunas tumorales presentaban ciertas limitaciones en el combate contra el cáncer, como la necesidad de aplicar más de una dosis, y el desarrollo de microambientes desfavorables para la inmunización.
Debido a lo anterior, surgió la necesidad de crear una vacuna de alto rendimiento que propiciara un ambiente oportuno para la inhibición de tumores, por lo que utiliza microcápsulas de autocuración con post-encapsulación y carga múltiple.
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Tras la aplicación de esta vacuna, se crea un microambiente de inmunización favorable, en el que la cinética de liberación de antígeno, el comportamiento de las células reclutadas y el entorno ácido circundante funciona de manera sinérgica.
Vacunas contra el cáncer
Las vacunas para el tratamiento del cáncer son diferentes a las vacunas comúnmente utilizadas para combatir enfermedades virales, pues las vacunas para el cáncer no buscan prevenir la enfermedad, sino preparar al sistema inmune para atacar las células cancerígenas.
Algunas vacunas para el tratamiento del cáncer se componen de un fragmento de células cancerosas, mientras que otras se elaboran a partir de células inmunes de un paciente oncológico.
Las vacunas contra el cáncer provocan que el sistema inmunitario ataque las células con uno o más antígenos específicos, y debido a que el organismo tiene células de memoria inmunológica, se espera que las vacunas funcionen a largo plazo.