Un grupo de profesores de la Universidad de Valencia, realizaron un estudio para conocer quienes tienen mejores condiciones de salud, si las personas que viven en pareja o las que no.
El estudio demostró que aquellos que no viven en pareja, tienen más posibilidades de sufrir de ansiedad o depresión crónica, que aquellas personas casadas o que viven juntas.
Simó-Noguera, autor del estudio explica que las mujeres que se quedan sin pareja, sufren más de ansiedad, mientras que los hombres en la misma situación, tienen graves riesgos de padecer depresión crónica.
Es por ello, que Noguera recalca los beneficios de la convivencia en pareja ya que si no existe dicha convivencia, se atenúa la mala salud de las personas.
"La clave no está en el estado civil por él mismo, sino que la encontramos en la interacción entre el estado civil y la situación de convivencia, por lo cual vivir con una nueva pareja después de la disolución del matrimonio preserva la salud de las personas implicadas", explicó.
El equipo de investigadores, declaró que estudios precedentes en el mundo, ya habían demostrado que el divorcio aumenta el riesgo de sufrir enfermedades que pueden llegar a lesiones a la salud mental, tanto en hombres como en mujeres.
El trabajo de la Universidad, utiliza indicadores de auto percepción de salud e información sobre enfermedades mentales diagnosticadas, por lo que logra medir el impacto de ruptura de una relación en la salud mental, además de que evalúa el efecto que tiene la convivencia en pareja.
(Con información de ABC)