Cómo vivir mejor es uno de los grandes temas por los que día a día tratamos de ajustar diversos aspectos de nuestras vidas; desde lo más simple hasta lo más complejo.
Un ejemplo claro es cuando la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) define como hábitos y estilo de vida saludables realizar actividad física, tener un adecuado peso corporal e higiene, además de procurar un ambiente limpio.
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Por lo tanto, hemos aprendido del denominado autocuidado que gran parte de nuestra calidad de vida tiene que ver con hábitos o estilos de vida que en ocasiones pueden resultar poco factibles y generar frustración; y es que todos somos distintos, distintas necesidades, oportunidades...
Te presentamos 5 recomendaciones sencillas que no te recetaría un médico o especialista pero que de igual manera pueden hacerte sentir mejor, que VIVAS y no sobrevivas.
1. Dejar el sufrimiento. Abandona los pensamiento de dolor, no te castigues más, toma la responsabilidad de tu vida y habla claro sobre lo que sientes; no se trata de buscar culpables o motivos para sentirte mal.
Una opción es la meditación, basta con 15 minutos diarios por la mañana y por la noche, relájate y sólo piensa lo suficiente en tus problemas, ni más ni menos. Ofrece soluciones más que obstáculos. Ámate.
2. Sentirte mal. Si hablamos en el lenguaje de los hábitos, este puede ser uno de los peores, en lugar de preguntarte, ¿por qué no? comienza a creer que puedes lograr todo y como una tarea diaria, repite: sí puedo.
Suelta esa necesidad de control y deja que la vida te sorprenda en tu camino.
3. Mejora tu relación con los demás. El perdón es básico, el perdón para ti por aquello que aun te lastima y a los demás por aquello que puede doler aun: ¿de qué te sirve ese rencor o ese dolor? Quizá estés perdiendo oportunidades importantes por vivir en el pasado.
4. Encuentra eso que te gusta y no te alejes de ello; realiza profesionalmente lo que siempre quisiste y amas.
Deja de anhelar lo que tienen los demás y disfruta lo que tienes.
5. Disfruta la naturaleza. Si eres de las personas preocupadas por el dinero, hay cosas que son gratis y para ti; sal a caminar, observa el paisaje: comparte tus gustos y aficiones, inclusive con tu mascota.
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Pueden sonar como 5 recomendaciones simples, pero en realidad a través del tiempo, son situaciones cotidianas a resolver.
Las enfermedades están presentes cada día y algunos factores a los que poco podemos prestar atención por creer que lo único que importa son los síntomas físicos, pueden ser la puerta no explorada hacia la salud, aquella anhelada condición que significa simplemente vivir y no sobrevivir.
¡Cuídate!
Un ejemplo claro es cuando la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) define como hábitos y estilo de vida saludables realizar actividad física, tener un adecuado peso corporal e higiene, además de procurar un ambiente limpio.
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Por lo tanto, hemos aprendido del denominado autocuidado que gran parte de nuestra calidad de vida tiene que ver con hábitos o estilos de vida que en ocasiones pueden resultar poco factibles y generar frustración; y es que todos somos distintos, distintas necesidades, oportunidades...
Cómo vivir mejor: 5 consejos simples
Te presentamos 5 recomendaciones sencillas que no te recetaría un médico o especialista pero que de igual manera pueden hacerte sentir mejor, que VIVAS y no sobrevivas.
1. Dejar el sufrimiento. Abandona los pensamiento de dolor, no te castigues más, toma la responsabilidad de tu vida y habla claro sobre lo que sientes; no se trata de buscar culpables o motivos para sentirte mal.
Una opción es la meditación, basta con 15 minutos diarios por la mañana y por la noche, relájate y sólo piensa lo suficiente en tus problemas, ni más ni menos. Ofrece soluciones más que obstáculos. Ámate.
2. Sentirte mal. Si hablamos en el lenguaje de los hábitos, este puede ser uno de los peores, en lugar de preguntarte, ¿por qué no? comienza a creer que puedes lograr todo y como una tarea diaria, repite: sí puedo.
Suelta esa necesidad de control y deja que la vida te sorprenda en tu camino.
3. Mejora tu relación con los demás. El perdón es básico, el perdón para ti por aquello que aun te lastima y a los demás por aquello que puede doler aun: ¿de qué te sirve ese rencor o ese dolor? Quizá estés perdiendo oportunidades importantes por vivir en el pasado.
¡Apasiónate!
4. Encuentra eso que te gusta y no te alejes de ello; realiza profesionalmente lo que siempre quisiste y amas.
Deja de anhelar lo que tienen los demás y disfruta lo que tienes.
5. Disfruta la naturaleza. Si eres de las personas preocupadas por el dinero, hay cosas que son gratis y para ti; sal a caminar, observa el paisaje: comparte tus gustos y aficiones, inclusive con tu mascota.
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Pueden sonar como 5 recomendaciones simples, pero en realidad a través del tiempo, son situaciones cotidianas a resolver.
Las enfermedades están presentes cada día y algunos factores a los que poco podemos prestar atención por creer que lo único que importa son los síntomas físicos, pueden ser la puerta no explorada hacia la salud, aquella anhelada condición que significa simplemente vivir y no sobrevivir.
¡Cuídate!