Main logo

10 formas de “bajar” la presión sin medicamentos

El diámetro de cintura puede incrementar el riesgo de hipertensión, descubre por qué.

Escrito en VIDA SANA el

¿Cómo bajar la presión? y ¿qué hacer para que no se suba la presión? son preguntas frecuentes alrededor de un padecimiento frecuente: la hipertensión arterial, una enfermedad crónica en la cual aumenta la presión con la que el corazón bombea sangre a las arterias, para que circule por todo el cuerpo.

En ese sentido, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) advierte que la hipertensión arterial es una enfermedad crónica que no tiene cura pero que es posible controlar y que la mayoría de las personas que la padecen no lo saben pues no tiene ningún síntoma, de ahí que le llamen “la enfermedad silenciosa”.

¿Cómo "bajar" la presión sin medicamentos?

Al respecto, información de Mayo Clinic indica que hay 10 formas de bajar la presión sin medicamentos, aunque nunca se debe abandonar el tratamiento prescrito por los especialistas.

Las 10 formas de bajar la presión sin medicamentos se enfocan más en el llamado “estilo de vida” que involucra hábitos y conductas que pueden beneficiar la salud, conócelas:

1. Peso. La presión arterial se incrementa cuando se aumenta de peso, por ello, el control del peso corporal es uno de los métodos más eficaces para controlar la presión arterial pues el sobrepeso puede generar apnea del sueño, una alteración respiratoria al dormir que también “sube la presión”:

“En general, puedes reducir la presión arterial aproximadamente 1 milímetro de mercurio (mm Hg) con cada kilogramo (aproximadamente 2.2 libras) de peso que bajes”.
 

2. Cintura. El diámetro de cintura puede incrementar el riesgo de hipertensión, los hombres con una medida de cintura superior a los 102 centímetros y mujeres con una medida mayor a 89 centímetros son más propensos a presentar presión alta.

3. Ejercicio. Si se tiene presión arterial alta, el ejercicio puede evitar que se convierta en hipertensión, los ejercicios aeróbicos son los más recomendados, por ejemplo, caminar, trotar, nadar, bailar o andar en bicicleta. El entrenamiento de fuerza al menos dos días a la semana también puede ser una alternativa ideal.

4. Alimentación equilibrada. Consume un plan de alimentación equilibrado que incluya gran cantidad de frutas, verduras, cereales integrales, productos lácteos bajos en grasa, reducir las grasas saturadas y el colesterol pues con lo anterior, se podría disminuir la presión arterial hasta en 11 mm Hg si ya vives con el padecimiento.

5. Más potasio. Incluye alimentos con potasio como el plátano o los jitomates que son frutas y verduras que al tener este mineral pueden reducir los efectos del sodio en la presión arterial.

6. Menos sodio. Una pequeña reducción de sodio de tu alimentación puede mejorar la salud del corazón y reducir la presión arterial aproximadamente entre 5 mm Hg y 6 mm Hg si padeces presión arterial alta. Evita la sal y los alimentos procesados.

7. ¿Alcohol? Beber demasiado alcohol puede aumentar la presión arterial y reducir los efectos de los medicamentos contra la hipertensión. Evita tomar bebidas alcohólicas.

8. Deja de fumar. Dejar el cigarro ayuda a regular la presión arterial disminuye el riesgo de enfermedades del corazón y mejora el estado de salud en general.

9. Cafeína. Conforme información de Mayo Clinic, la cafeína puede elevar la presión arterial hasta 10 mm Hg en personas que no la consumen con frecuencia. Los efectos de la cafeína a largo plazo no son del todo claros, pero se sugiere moderar el consumo de café, té y bebidas energéticas que contengan esta sustancia.

10. Reduce el estrés. El estrés crónico puede incrementar la presión arterial, aunque las investigaciones al respecto continúan, por ello es necesario destinar tiempo para la relajación y actividades que disfrutes.

Finalmente, pese a que la presión arterial alta no genere síntomas, en raras ocasiones las personas refieren sentir dolor de cabeza intenso, zumbido de oídos, mareo, sensación de ver luces, visión borrosa, dolor en pecho o espalda y tobillos hinchados. Recuerda siempre consultar con un especialista acerca de los puntos anteriores y todas las dudas que tengas para controlar tu presión.