Expertos señalan que existe el riesgo de sufrir daños en la piel por usar cubrebocas, especialmente en personas que lo usan durante muchas horas durante el día, como los médicos, enfermeras y todo el personal sanitario, así como las personas que usan el transporte público.
Llevar tantas horas puesta una mascarilla o cubrebocas puede provocar problemas en la piel de quienes las llevan, debido al sudor y el roce constante. Afortunadamente es posible prevenirlo siguiendo algunas recomendaciones de los expertos en dermatología.
Prevenir daños en la piel por cubrebocas
Expertos en cuidados de la piel de la Universidad de Huddersfield en Inglaterra señalan que al llevar durante mucho tiempo un cubrebocas, es posible sufrir de irritaciones y hasta infecciones en la piel del rostro.
Al respecto, la profesora Karen Ousey, directora del Instituto de Prevención de Infecciones e Integridad de la Piel de la Universidad de Huddersfield, realizó una investigación sobre el daño en la piel causado por distintos dispositivos médicos, incluyendo los cubrebocas.
La experta indica que al usar durante muchas horas continuas el cubrebocas aumenta el sudor debajo, causando fricción y daños por una mayor presión en la piel de la nariz y las mejillas.
“Como resultado, puede haber erosiones en la piel y esto puede conducir a una posible infección”, advierte Ousey.
TAMBIÉN LEE: 5 peores errores al usar un cubrebocas
Para tratar de contrarrestar estos daños, algunos profesionales de la salud optan por ponerse vendajes en la piel debajo del cubrebocas, pero esto solo causa que la mascarilla ya no ajuste como debería y que aumente el riesgo de exposición a los virus.
Entonces, ¿cómo prevenir los daños en la piel por usar cubrebocas? Lo ideal es que toda persona que use esta protección en el rostro durante varias horas siga las siguientes recomendaciones:
1. Mantener la piel limpia y bien hidratada
2. Aplicar cremas de barrera media hora antes de ponerse el cubrebocas
3. Quitarse el cubrebocas por lo menos cada dos horas para aliviar la presión
Para este último paso, la experta indica que la persona debe alejarse a un lugar cerrado, quitarse la mascarilla sin tocar el frente de la misma sino por los hilos que la ajustan, y limpiar e hidratar la piel nuevamente.
En caso de empezar a sentir que el cubrebocas roza demasiado en la piel del rostro, hay que retirarla también un momento para evitar irritaciones graves que causen rasgaduras en la piel y posteriormente, infecciones.
¿Cómo colocar correctamente el cubrebocas?
Se debe ajustar firmemente, pero de manera que no sea incómodo llevarla, para ello, debemos ajustar los lazos o los ganchos. El cubrebocas debe permitir la respiración sin restricciones y cuando no sean desechables, es importante lavarlos y secarlos perfectamente sin dañar la tela ni la forma de la mascarilla.
Recuerda que debes usar el cubrebocas de manera que cubra completamente tu nariz, boca y barbilla y será indispensable que la lleves en el transporte público y en espacios donde no sea posible mantener la sana distancia (1.5 metros). No te quietes la mascarilla en la calle, espera hasta llegar a casa y lávate las manos inmediatamente después de retirarla.
Ante cualquier irritación o daños en la piel por usar mucho tiempo el cubrebocas, consulta al médico especialista.
SIGUE LEYENDO: ¿Cómo reparar los daños en la piel de las manos por tanto lavarlas?
(Con información de Infosalus)