El esmegma es una secreción de los genitales de color blanco que generalmente afecta a los hombres, sin embargo, especialistas alertan que también puede alojarse en el cuerpo de las mujeres. Conoce las consecuencias de tener esmegma en la vagina y cómo eliminarlo.
Dejar que esta secreción se acumule, puede tener efectos negativos en la salud íntima, así que siempre debes estar al pendiente de no tenerlo.
Esmegma en la vagina
La salud vaginal no solo afecta tu vida sexual, es una parte importante del estado de tu estado de salud general.
De acuerdo a Mayo Clinic, existen muchos factores que pueden dañar la salud de la vagina, como las pastillas anticonceptivas, el embarazo, los cambios hormonales y la mala higiene de la zona. Una limpieza incorrecta de los genitales es la principal causa de esmegma.
El esmegma es una secreción íntima de color blanco poco conocida pero que es más común de lo que parece. De acuerdo a la European Academy of Dermatology, esta sustancia es producida naturalmente tanto en el pene como en la vagina y está compuesto por secreción de la piel, células muertas y bacterias.
La función del esmegma naturalmente es lubricar la zona y su producción es algo normal producido por el cuerpo humano.
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No obstante, cuando esta secreción íntima se acumula en exceso por una mala higiene, puede convertirse en un problema de salud importante, como infecciones íntimas.
En las mujeres, el esmegma se aloja en los labios internos de la vulva, cerca del clítoris.
Puedes reconocerlo si ves una capa de secreción blanquecina, espesa y con mal olor en tu vagina de forma constante.
¿Cómo prevenirlo?
La principal razón por la que se acumula el esmegma en la vagina es una mala higiene íntima, por lo que es importante cuidar muy bien la limpieza de la zona, aunque tienes que hacerlo correctamente, pues lavar en exceso o con los productos incorrectos también causa problemas.
Lo ideal es que laves tu vagina todos los días solo con agua tibia y un poco de jabón sin aroma o un jabón especialmente para la zona íntima. Nunca uses jabones fuertes o con aromas, mucho menos las famosas duchas vaginales.
Muchas de las duchas se hacen con vinagre o bicarbonato, ingredientes muy agresivos que pueden dañar seriamente el pH de tu zona íntima y aumentan el riesgo de infecciones o resequedad vaginal.
Lava la vagina con movimientos de adelante hacia atrás para evitar arrastrar bacterias del ano al área genital.
No necesitas esponjas ni otras cosas para lavar, usa tus manitas perfectamente limpias y lava con mucha suavidad.
Otro punto importante que debes tomar en cuenta es el secado de tu zona íntima, siempre tómate el tiempo de secar muy bien antes de ponerte tu ropa interior, usa una toalla limpia para hacerlo.
Cuida tu vagina y si tienes otras molestias además del esmegma, como comezón, ardor, flujo vaginal con mal olor, cambios en tu menstruación o dolor durante las relaciones sexuales, debes acudir al ginecólogo de inmediato para conocer las causas del problema.
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