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Hijos únicos son más propensos a ser obesos

También es más probable que coman comidas rápidas con frecuencia

Escrito en VIDA SANA el

"Acábate el pozole", "toma, te compré tu refresco favorito", "¿Quieres unas papas"? y "¿Por qué no invitas a tus compañeros y vamos todos juntos a comer hamburguesas?", son algunas de las frases celebres que se pueden escuchar de los padres de familia hacia sus retoños y esto se ha normalizado tanto que se ha convertido en un problema.

Ser hijo único no significa que todo será color de rosa. Sí, les compran todo lo que quieren y les cumplen todos (o la mayoría de) sus caprichos, pero un estudio encontró que las personas que no tienen hermanos son más propensos a tener obesidad.

Este padecimiento es un tema serio. La OMS menciona que cada año fallecen, como mínimo, 2,8 millones de personas a causa de la obesidad o sobrepeso y si la UNICEF informa que México está entre los primeros lugares en obesidad infantil a nivel mundial, pues se tiene que empezar a inculcar la salud alimentaria de los pequeños desde el hogar.

La investigación, publicada en el Journal of Nutrition Education and Behavior (JNEB), detalla que los riesgos de padecer un mayor peso de lo recomendado en familias que no tienen más de un heredero se debe a que dan por sentado muchas cosas (o no les interesa) y los conjuntos con más pequeños tienden a tomar decisiones de alimentación más saludables.

 

 

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Por ahí existe una frase que dice que "la gente no cree que algo puede pasar hasta que sucede. No es ignorancia ni estupidez, es simplemente el comportamiento humano" y  tal vez los padres piensan que si sobrealimentan a los hijos únicos, estos serán felices, sin tomar en cuenta las consecuencias que puede tener para su salud en ese momento o en un futuro.

El estudio y los resultados:

Los especialistas encontraron que los hijos únicos, a los que denominaron "solteros" , tenían prácticas de alimentación familiar menos saludables (y también de opciones de bebidas) y un puntaje total del Índice de Alimentación Saludable 2010 menor de lo recomendado en tres de las 12 áreas medidas. Así mismo, mostraron puntajes totales significativamente más bajos entre semana, fines de semana y en promedio, lo que indicó que hay diferencias individuales y colectivas en los patrones de alimentación entre los grupos.

Durante el estudio, los datos se autoinformaron en los registros diarios de alimentos que las madres mantenían durante tres días: dos laborables y un día de fin de semana y los maestros mantuvieron registros por poder de cualquier alimento que los niños comieran mientras estaban en sus respectivas escuelas.

La indagación también arrojó el dato de que las madres de los pequeños "solteros" tenían más posibilidades de ser obesas. Por otra parte, su Indice de Masa Corporal (IMC) tenía una conexión muy fuerte con el percentil del IMC del niño.

 

 

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"Los profesionales de la nutrición deben considerar la influencia de la familia y los hermanos para proporcionar una educación nutricional adecuada y personalizada para las familias de niños pequeños. Se deben alentar los esfuerzos para ayudar a todos los niños y las familias a establecer hábitos y prácticas alimentarias saludables", mencionó la autora principal del estudio Chelsea L. Kracht, PhD, quien completó la investigación junto con la Dra. Susan Sisson en el  Centro de Ciencias de la Universidad de Oklahoma Health.

Recuerda que la alimentación no es un juego y que eres el modelo a seguir de los hijos , por lo que harán lo que tú hagas. Si te alimentas bien, ellos harán lo mismo. Pero si por el contrario te la vives comiendo papitas, dulces, refrescos, tacos, carnitas y otros alimentos poco saludables, ellos se verán influenciados por esto y copiarán ese comportamiento.

La comida en las escuelas no ayuda en muchos casos, pero si le enseñas, se empezará a cuidar desde más temprano y evitará los problemas de salud ligadas al exceso de peso.

 

Con información de OMS, UNICEF, The Journal of Nutrition Education and Behavior