Saber qué determina el color de ojos de un bebé no es tan fácil como parece, pues influyen diversos factores, no solo la herencia de los padres o abuelos. De hecho, el color de ojos es como la huella digital, pues nadie tiene el mismo color exacto, ni siquiera entre hermanos.
Esto es todo lo que tienes que saber sobre el color de ojos y qué es lo que determina que tengamos uno u otro color.
Color de ojos de un bebé
Muchas veces, los padres desean que los bebés nazcan con cierto color de ojos, pero atinar al color que tendrán no es nada fácil, ya que influyen muchos factores.
En primer lugar, el color de ojos no solo es herencia de los padres, sino de varios de nuestros antepasados.
Por ello, es imposible que alguien tenga exactamente el mismo color de ojos que otra persona, ya que la forma en la que el color de manifiesta es única e irrepetible en cada uno.
Al respecto, la Academia Americana de Oftalmología (AAO), explica que el color del ojo humano depende una multiplicidad de genes.
“Los científicos tienen buena comprensión de un par de estos genes, que determinan los colores de ojos más comunes: cafés, azules y verdes. Pero aún están explorando cómo se desarrollan otros colores como el avellana, el azul grisáceo y otras combinaciones”, señalan.
Creer que el color de ojos de un bebé se determina por la mezcla de los colores de los padres o los abuelos es un error, pues en realidad se trata más de un juego de suerte y azar. Por ejemplo, dos padres de ojos azules podrían tener un hijo con ojos café.
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El Instituto Catalán de la Retina (ICR) indica que el color de ojos de un bebé depende principalmente de la cantidad y distribución de la melanina, un pigmento marrón que se encuentra en el iris.
Entre menos melanina tengamos, más claros serán los ojos, pues la cantidad y distribución de melanina es lo que hace únicos el color de ojos de cada persona.
Por ello, aunque una persona comparta con sus familiares un color de ojos similar, en realidad nunca será exactamente igual.
Casi todos los bebés nacen con los ojos azules pero estos pueden oscurecerse durante los primeros 3 años de vida dependiendo de la melanina que desarrollen.
“Si ambos padres tienen ojos de color café, lo más probable es que los hijos tengan también ojos de este color. El color de ojos más oscuro tiende a ser el predominante por lo que, en la mayoría de los casos, el color café es más frecuente que el verde y el verde suele ser más frecuente que el azul”, explica la AAO.
Sin embargo, también subrayan que no significa que un niño con uno de los padres de ojos azules y otro de ojos café, necesariamente tendrá ojos oscuros, aunque estos son los más comunes en el mundo.
El 50% de las personas los tienen color café, mientras que todas las personas con ojos azules tienen una característica genética específica que demuestra que comparten un ancestro común.
Ojos azules vs ojos verdes
Una particularidad de los ojos azules es que mientras los ojos café obtienen su color de la melanina, el mismo pigmento que da color a su piel, los azules no tienen pigmento azul en ellos y obtienen su color de la misma forma en la que lo hace el agua, y en la misma en la que lo hace el cielo: dispersando la luz de manera que ésta se refleja hacia afuera una mayor cantidad de luz azul.
Por su parte, los ojos verdes son los menos comunes, solo cerca de un 2% de la población los tiene de este color.
Esto se debe a que además de que hay poca melanina, hay un efecto óptico de la dispersión de la luz reflejada que hace que se vean verdes.
¿Te imaginabas que determinar el color de ojos de un bebé fuera tan complicado?
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(Con información de Infosalus)