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"Niños con labio y paladar hendido no deberían ser escondidos"

En México nacen más de tres mil niños con labio y paladar hendido cada año

Escrito en SOY MAMÁ el

¿Si tu hijo naciera con un aspecto diferente lo querrías igual? A pesar de que la familia debería sentir un amor incondicional por todos los integrantes de ella, existen quienes esconden a los pequeños afectados por labio y paladar hendido por sentimientos de culpa.

El 23 de julio se conmemora el día mundial del labio y paladar hendido, una afección de nacimiento común que puede ocurrir solo o como resultado de un síndrome o trastorno genético.

Labio y paladar hendido: “por favor, no le llamen labio leporino”

El doctor y jefe de Servicio de Cirugía Plástica en el Instituto Nacional de Pediatría, Gerardo Fernández Sobrino, explica para SuMédico que el labio y paladar hendido es un padecimiento sin causa conocida, que es multifactorial.

“Uno de los factores de riesgo es la desnutrición o la falta de ácido fólico. Este padecimiento es conocido como labio leporino, pero ya no se le debería llamar así porque es un término peyorativo. Estamos mal acostumbrados a decirle así. Hay que tratar de quitar ese término”, apunta el especialista.

En palabras del doctor Fernández Sobrino, se tiene el estimado de cuántos pequeños nacen al año con labio y paladar hendido: cerca de 3,000 mexicanos.

“Lo más importante es el diagnóstico temprano. Es algo que se puede encontrar desde que están en el feto y lo ideal es encontrar esta afección desde antes de que nazca el pequeño. Esto se puede hacer por medio de un ultrasonido”, abunda el miembro de la Asociación Médica del Centro Médico ABC.

Si no se diagnostica de manera prenatal, Fernández Sobrino recomienda que se actúe desde el momento del nacimiento. Hay que dar técnicos de alimentación al seno materno y poner unas placas en el paladar para que el pequeño tenga una evolución favorable y empezar a operar.

“Se puede operar desde los tres meses, siempre y cuando el bebé esté en buenas condiciones", menciona.

{"field1":"\"Hay que ir con un medico especialista en labio y paladar hendido para que el recién nacido sea atendido por un equipo multidisciplinario”","field2":"Gerardo Fernández Sobrino"}

La importancia de la psicología

El doctor apunta que la familia de un recién nacido con labio y paladar hendido debe ser vista por un especialista, porque se ha podido ver que los primeros que estigmatizan y señalan a los bebés son los elementos del entorno familiar.

Cuando el niño nace con labio y paladar hendido se puede ver afectado el desarrollo normal del habla, ya que la zona del paladar y los labios son partes fundamentales del cuerpo para articular algunos sonidos.

“El habla en estos pacientes puede ser difícil de entender ya que se escapa gran parte del aire por la nariz y a veces pueden llegar a presentar voz gangosa”, dice el doctor.

Cuando se les hace una intervención quirúrgica temprana, se les proporciona un mecanismo mejor en el habla y en los hábitos de alimentación.

{"field1":"Además, una medida que los niños van creciendo deben contar con profesionales del habla para seguir cerca de las habilidades comunicativas","field2":""}

"Los esconden por el sentimiento de culpa y repercuten en el crecimiento del menor"

Uno de los casos que más han marcado al especialista es el de un niño con labio y paladar hendido que fue escondido por su familia debido a su aspecto. El menor ya no era un recién nacido y no sabía comunicarse con palabras.

"Cuando lo vi, tenía miedo. No solía comunicarse con otras personas y lucía atemorizado al vernos. Se vio que se le dieran todos los cuidados para que comenzara a interactuar y superara su miedo", comenta el doctor Fernández Sobrino.

{"field1":"\"Si se trata esta condición del labio y paladar hendido, los niños pueden crecer y llevar una vida normal\"","field2":""}

El Programa de alta especialidad del Centro Médico ABC

Existe un programa gratuito para las personas con labio y paladar hendido en el Centro Médico ABC, pero para poder ingresar se necesitan cumplir ciertos requisitos:

  • Edad igual o menor a 10 años.
  • Residencia actual en la República Mexicana.
  • Cumplir con los criterios socioeconómicos.
  • Sin afecciones neurológicas o cardiológicas de gravedad.
  • En caso de contar con ellos, presentar un resumen clínico o estudios previos