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7 signos que indican que hay que llevar a un niño al podólogo

Los cambios en los pies o la presencia de algunas molestias al caminar indican que debemos llevar a un niño al podólogo para evitar complicaciones

Escrito en SOY MAMÁ el

La salud de los pies es fundamental para mantener un estado de bienestar general y en el caso de los más pequeños del hogar, hay 7 signos que indican que es momento de llevar a un niño al podólogo, que es el especialista en tratar los problemas de esta parte del cuerpo. Estas señales, alertan la presencia de anomalías que, de no tratarse, se pueden agravar.

Expertos del Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunitat Valenciana (ICOPVC), subrayan la necesidad de revisar los pies de niños periódicamente, para detectar cualquier problema en esta zona del cuerpo de manera oportuna, como una mala pisada o infecciones.

Por ello, comparten las principales señales que indican que es momento de llevar al niño con un podólogo, por lo que todos los padres deben estar muy al pendiente.

Signos de que hay que llevar al niño al podólogo

¿Revisas los pies de tu hijo frecuentemente? Si no lo haces, es momento de hacerlo, pues hay algunos cambios que indican el desarrollo de problemas que requieren revisión especializada, tales como: 

1. Color de las uñas

Es fundamental vigilar el color de las uñas del niño, ya que, si aparecen manchas blancas, cambian de color y se ponen amarillentas o se rompen con demasiada facilidad, podrían indicar hongos, bacterias o el desarrollo de enfermedades sistémicas como los trastornos circulatorios, la psoriasis o los traumatismos o lesiones que surgen con cada pisada.

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2. Aparición de verrugas

Las verrugas plantares pueden afectar a los niños y lo más grave es que en muchos casos, se confunden con simples callos, pero indican la presencia de una infección vírica que se puede propagar con facilidad a otras partes del cuerpo.

3. Deformidades

Si aparecen juanetes, dedos en forma de garra u otras deformidades de manera repentina, no debemos perder tiempo y hay que llevar al niño al podólogo para iniciar con el tratamiento correspondiente que, en algunos casos, es la cirugía.

4. Dolor lumbar

El dolor en la parte baja de la espalda o la zona lumbar en los niños no es normal y generalmente está relacionado con una mala pisada, por lo que será necesario llevarlo con el experto para analizar qué tan grave es el problema y recomendar el mejor calzado para corregirlo.

5. Desgaste del calzado

Como padres, también es importante estar al pendiente de cómo se desgasta la suela de los zapatos del niño, pues si notamos que hay un desgaste excesivo o irregular, podría ser un signo de alteración de la marcha. En este caso, el podólogo infantil debe hacer un estudio de la pisada para evitar lesiones o agravar el problema.

6. Tropiezos constantes

Notar que un niño tiene tropiezos constantes no es normal ni tampoco significa que sea torpe, podría ocultar alteraciones funcionales del esqueleto, lo que está relacionado en la mayoría de los casos con pie plano.

7. Picor o dolor en el talón

Finalmente, otra de las señales que indican que hay que llevar el niño al podólogo es que constantemente se queje de molestias como picores o dolor en el talón, pues son indicadores de hongos, exceso de sudoración, infecciones o en casos más graves, fascitis plantar o espolón, problemas que se general por más de 20 alteraciones en los pies, así que será fundamental determinar el origen específico para tratarlo lo antes posible.

No debes ignorar ninguna de las señales que indican que debes llevar al niño al podólogo, pues los problemas en los pies pueden agravarse y causar molestias que afecten la calidad de vida del pequeño.

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(Con información de Infosalus)