Calmar a un bebé que no para de llorar puede ser algo muy estresante y hasta frustrante, especialmente para las mamás primerizas que no saben cuáles son las razones por las que podría llorar el pequeño.
Toma nota de las 10 razones más comunes por las que los bebés tienen un llanto insistente y cómo hacer que se tranquilice.
Razones por las que un bebé no para de llorar
De acuerdo al pediatra y neonatólogo José María Lloreda, autor del Manual para padres primerizos, hay muchos datos que pueden ser guía para calmar a un bebé que no para de llorar.
Según el experto, los bebés suelen llorar cuando sienten dolor, miedo, calor, hambre, frío o inseguridad, aunque en realidad hay una gran lista de razones por las que un bebé no para de llorar.
Incluso pueden llorar por sobreestimulación, por lo que es importante conocer cuáles son las necesidades que el niño expresa con el llanto.
Un mito muy arraigado que debemos esquivar a toda costa es el que afirma que lo mejor es ignorar al bebé y dejarlo que llore hasta que se calme, pero esto es simplemente una práctica horrible que no hace más que afectar la confianza del pequeño.
Incluso hay quienes dicen que no debemos darle de comer al bebé cada que lo pide, pero eso también es falso, pues un bebé pide pecho o su mamila por varios motivos, además del hambre, como el consuelo y la sed.
“El bebé no tiene que aguantar ningún horario si tiene la necesidad de alimentarse, de sed o de que lo agarren”, señala el especialista.
Sin embargo, cuando un bebé no para de llorar, puede surgir una situación que disminuya la confianza de las madres y padres, especialmente los primerizos, generando estrés e irritabilidad en el hogar y empeorando el llanto del pequeño.
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La Biblioteca Nacional de Medicina de los EE.UU., señala que llorar es la manera en la que se comunican los bebés, pero si el pequeño llora demasiado, puede ser señal de algo que necesita un tratamiento médico.
Algunas de las razones más comunes del llanto excesivo en bebés, son:
1. Hambre o sed
2. Aburrimiento y soledad
3. Cólicos
4. Incomodidad o irritación por un pañal sucio, por gases excesivos, por frío o calor
5. Enfermedad
6. Infecciones
7. Medicamentos
8. Contracciones o espasmos musculares
9. Dolor
10. Salida de los dientes (dentición)
¿Qué hacer para tranquilizarlo?
En ese sentido, entre las recomendaciones básicas que hace el pediatra Lloreda para calmar a un bebé que no para de llorar, están las siguientes:
-Dale de comer
-Mira su pañal y cámbialo si está sucio
-Intenta dormirlo
-Cárgalo y hazle cariñitos en tus brazos
-Quítale algo de ropa si está muy abrigado
-Toca su piel y obsérvala de cerca, por si hay algún sarpullido o irritación
-Comprueba su temperatura
-Háblale tranquilamente y acaricialo con mucha suavidad
-Examina todo su cuerpo, busca alguna fuente de dolor o incomodidad
-Si estás muy estresado, permite que otra persona más calmada tome al bebé y le dé un paseo
Algunos bebés se tranquilizan al escuchar un sonido leve y continuo, como el de la televisión, algunos simplemente dando un paseo.
Recuerda que si el llanto no cesa con nada, entonces será momento de llevarlo al médico, pues podría ser señal de alguna molestia más seria.
Nunca dejes llorando al bebé mucho tiempo ni tampoco lo sacudas, si te sientes desesperada, mejor pídele ayuda a alguien más para tranquilizarlo.
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(Con información de Clarín)