Una pareja debe ser tu confidente, alguien con quien no tengas pena de decirle o contarle tus mayores miedos pero en ocasiones hay frases que pueden asustarla y que dices involuntariamente. A continuación te decimos algunas de ellas.
Cuando estamos en confianza involuntariamente podemos decir cosas sin pensarlas pues las personas con las que estamos nos hacen sentir bien y no imaginamos que nos puedan juzgar o que las podamos asustar con lo que decimos.
Frases que pueden asustar a tu pareja pero que dices involuntariamente
La confianza es una característica esencial de una relación de pareja exitosa, es la piedra angular sobre la que reposa cualquier intento de vida en común. Sin ella no hay posibilidad de que la pareja sobreviva.
En ocasiones aunque exista mucha confianza entre la pareja hay frases que pueden asustarla aunque las digas involuntariamente, tales como:
Mi vida es un desastre
Todos tenemos días malos, pero un comentario aparentemente inocente se puede escuchar muy intenso y puede interpretarse erróneamente como una señal de que estás deprimida o deprimido.
Ponte en el lugar de tu pareja y qué pensarías si la otra persona fuera la que dijese eso, das a entender que no te gusta la vida que estás viviendo y tu pareja forma parte de ella.
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Tener hijos me pone nerviosa
La decisión de tener hijos se debe de tomar en pareja, tanto la mujer como el hombre deben estar de acuerdo en ello y jamás se deben de ver forzados a tenerlos si no es lo que quieren.
Aunque esta es una plática que deben tener en pareja, no es recomendable hacer este tipo de comentarios de manera airada y cambiar de tema, si estás decidida o no a embarazarte o si te da miedo debes de abordarlo con seriedad.
Nunca tengo dinero
Esta es una frase que puede espantar a tu pareja ya que si trabajas y nunca tienes dinero, se puede interpretar que no lo sabes a administrar y si bien el dinero no da la felicidad sí es un factor importante para muchas cosas.
Ni el hombre ni la mujer deben estar comprometidas a siempre pagar todos los gastos de la pareja, recuerda que siempre debe existir un equilibrio en donde ambos se apoyen y puedan salir juntos adelante.
Odio mi trabajo
Como en la vida en general, existen días laborales no tan buenos, pero estar diciendo que odias o que detestas tal o cual cosa puede ser abrumador para tu pareja, que si bien siempre debe estar para escucharte, eres tú quien debe de ponerle orden a tus pensamientos. Decir que odias tu trabajo puede generar inestabilidad en la pareja ya que esa es la fuente de ingresos.
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No me cae bien tu familia
Se debe de tener sensibilidad para decir las cosas, si tu familia política no te cae bien es válido, pero debes saber en qué contexto y cómo decírselo a tu pareja ya que de lo contrario no solo puedes espantarla sino provocar peleas y discusiones con tu ser amado.
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(Con información de: Cosmopolitan y Women’s Health)