Presentar dificultades para embarazarse puede ser una verdadera tortura a nivel psicológico, pues en ocasiones llega a significar un replanteamiento del proyecto de vida, o incluso considerar que la vida ya no tiene sentido, especialmente porque las mujeres “están programadas para ser mamás, y nadie les enseña que no van a tener hijos”.
De acuerdo con la psicóloga Cori Hofman es verdad que en ocasiones hay problemas médicos de por medio como una endometriosis, problemas de ovulación, de tiroides, o de disfunción eréctil entre otros, pero muchas veces el miedo y la desinformación son factores muy importantes que impiden lograr un embarazo.
Pero el secreto para lograr de mejor forma el objetivo está en usar las palabras adecuadas según refirió la psicóloga Cori Hofman:
- Infertilidad es una condición actual pasajera, y que puede superarse, pues si las personas no lo ven de esta forma, se presenta como una crisis emocional igual que la que enfrentan los pacientes diagnosticados con cáncer, pues todo su proyecto de vida se ve amenazado.
- Hay que aprender a manejar las alteraciones sociales y con la pareja porque empieza a sentirse mucho coraje y rabia en contra de la pareja, y se siente pena ante la sociedad.
- Las mujeres sienten muchos celos de las mujeres que se encuentran embarazadas, especialmente de aquellas que saben que no estaban buscando un hijo.
- Existe un sentimiento de incomprensión.
- Las parejas se aíslan de la sociedad con tal de no tener que presenciar las constantes preguntas sobre cuando planean tener hijos.
- Hay mucho pesimismo por la incertidumbre de no saber cuándo se resolver el problema aún cuando ya estén en tratamiento y si este tratamiento servirá.
- Tanta angustia genera una baja en el autoestima del paciente que genera mayor dificultad para lograr el embarazo.
- La ansiedad y la depresión causan una baja hormonal debido a los tratamientos.
- En 13% de los casos hay ideaciones suicidas y éstas se llevan a cabo.
Y además, todo esto se complica, indicó Hofman, porque tanto hombres como mujeres perciben de modo distinto este proceso de infertilidad, pues mientras para las mujeres es una función básica de la vida que la deprime, al hombre le avergüenza saber que no es capaz de embarazar a su mujer.
Por otro lado, la mujer se siente devaluada e incluso llega a decirle al hombre “búscate otra que sí te pueda dar hijos” y muchos matrimonios se disuelven porque, dice la especialista, la mamá de los hombres les refuerzan eso con frases como: “consigue a alguien que si te sirva”, como si una mujer fuese inservible por tener problemas de infertilidad.
Y, mientras la mujer dice sentirse profundamente deprimida, cuando se le pregunta al hombre sobre su situación emocional, siempre refiere como se siente la mujer, pero él mismo se evade del problema.
Y todo esto porque el shock de la noticia es muy grande y generalmente esperan mucho tiempo para acudir con los especialistas adecuados, pues creen que se resolverá solo de la noche a la mañana y en realidad lo que les falta es mucha información.
Para ello, Hofman indicó que la clave es acudir con un especialista que no sólo sea ginecólogo, sino además sea biólogo de la reproducción y el tratamiento médico se acompañe de apoyo emocional con un especialista en la psicología de la salud reproductiva, y así es mucho más sencillo enfrentar todos estos problemas, asumir su realidad y lograr tener un hijo, ya sea por métodos espontáneos, asistidos, congelación de óvulos cuando es posible, o por métodos alternos como la adopción o con ayuda de una “panza de otra mujer.
Al respecto, Luis Aguilar, gerente del área terapéutica de fertilidad en laboratorios Merck, indicó que ante la necesidad de las personas de querer encontrar todo en internet, un equipo de médicos especialsitas del laboratorio han colaborado con la creación del portal fertility.com.mx, en donde las personas desde la comodidad de su casa pueden tener un primer acercamiento sobre su situación y recurrir a las clínicas y especialistas indicados que pueden elegir de una extensa base de datos en la misma web.