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Mala alimentación se refleja en el rostro

Ojeras, granitos o manchas, pueden ser producto de lo que consumes en exceso o tu cuerpo no digiere bien.

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De acuerdo a Nigma Talib, una celebrity expert en el cuidado de la piel, el rostro puede indicarnos con seguridad qué es lo que más consume una persona, si tiene una buena o mala alimentación y saber qué es lo que el organismo no puede digerir bien.
"Unas cuantas copas de vino pueden desatar arrugas alrededor de la boca y los ojos y, si eres intolerante, una salsa cremosa o un pedazo de queso puede causar un breakout irregular en la cara u ojeras", asegura.


Asimismo, indica que cuando se presentan problemas en la digestión por una mala alimentación, se desencadena una serie de reacciones hormonales y químicas que aceleran el envejecimiento de la cara.


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La piel refleja una mala alimentación


En su libro "Reverse The Signs Of Ageing: The Revolutionary Inside-Out Plan To Glowing, Youthful Skin", la celebrity explica que hay cuatro tipos de rostro que se caracterizan por los síntomas de una mala alimentación o por ciertos alimentos como lácteos, alcohol o azúcares, los cuales son los siguientes:


1. Rostro de vino: los rasgos que la caracterizan son las líneas pronunciadas alrededor de los ojos, tener párpados caídos, piel deshidrata, poros alargados así como cachetes y nariz rojizas.


2. Rostro de lácteos: cuando el organismo no los puede digerir bien, se presentan párpados hinchados, ojeras, manchas blancas e inflamaciones en la barbilla.


3. Rostro de azúcar: cuando se consume mucha azúcar o no se procesa correctamente, las líneas y arrugas se marcan en la frente, se produce hundimiento debajo de los ojos, el aspecto es demacrado, la cara se adelgaza y aparecen manchas pustulosas.


4. Rostro de gluten: los cachetes rojizos e inflamados así como marchas de pigmentación oscuras en la barbilla, son algunos síntomas de que se tiene intolerancia al gluten.


Recuerda que una mala alimentación no sólo puede afectar tu cutis o rostro, sino que además puede detonar problemas de salud más graves asociados con la carencias nutricionales, como la anemia, o por sus excesos, como la obesidad y diabetes. ¡Cuídate y cuida tu piel!


(Con información de Vancouver Sun y Revista Quién)