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Consumir ácido fólico reduce riesgo de esquizofrenia

Es un un trastorno psiquiátrico grave y crónico.

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Un estudio publicado en JAMA Psychiatry refiere que el consumo de ácido fólico en conjunto con la vitamina B12 pueden mejorar los síntomas de esquizofrenia.

Datos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), indican que más de 1 millón de mexicanos padecen esquizofrenia. Pese a que han sido identificados más de 12 genes realaciondos con la enfermedad, aun no se conocen con exactitud las causas genéticas o físicas de esta enfermedad.

Se estima que la esquizofrenia afecta por lo menos al 1% de la población mundial. La Organización Mundial de la Salud (OMS), considera esta enfermedad como un problema de salud pública; el diagnóstico de esquizofrenia representa alrededor del 50% de las hospitalizaciones psiquiátricas en todo el mundo.

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Ácido fólico disminuye el riesgo de esquizofrenia


Joshua Roffman, autor principal del estudio publicado en JAMA Psychiatry, refiere que el descubrimiento de que el ácido fólico y la vitamina B12 pueden mejorar el tratamiento de la esquizofrenia, esto a partir de comparaciones con un grupo control que no tomó ácido fólico.



La investigación sugiere obtener ácido fólico no solamente a partir de un suplemento; se requiere también de fuentes alimenticias. Por grupo de alimentos, las fuentes principales de ácido fólico principales, son:

Cereales. Todos los cereales integrales, principalmente avena, maíz, germen de trigo o pan integral.

Frutas y verduras. Naranja, plátano, melón, aguacate lechuga, espárragos, brócoli y espinacas.

Alimentos de origen animal. Puede ser pollo, pavo o carne de res.

Legumbres. Se puede elegir entre lentejas, habas, frijoles, garbanzo, soya y cacahuates.



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El Centro Nacional de Excelencia Tecnológica en Salud (CENETEC), define a la esquizofrenia como un trastorno psiquiátrico grave y crónico que se clasifica dentro de los trastornos psicóticos.

Se trata de un trastorno del pensamiento con manifestaciones en áreas diversas como la motivación, la percepción, la conducta, el afecto y la actividad motora.