Main logo

El infarto cerebral, ¿qué es y cómo podemos prevenirlo?

Es la segunda causa de muerte en el mundo y la primera causa de discapacidad en adultos

Escrito en OPINIÓN el

El infarto cerebral es un tipo de enfermedad neurológica que se presenta cuando falta sangre a una región del cerebro y ocasiona que se pierda su función en forma repentina.

Es una emergencia grave, similar al infarto al corazón, donde el tiempo es muy importante para que el paciente se pueda recuperar y en muchos casos se puede prevenir.

Las personas suelen conocer la enfermedad como embolia, ictus o EVC. Los médicos le decimos Enfermedad Vascular Cerebral, o EVC, tanto a los infartos cerebrales o EVC isquémicos como a las hemorragias cerebrales o EVC hemorrágicos.

En el mundo se considera la segunda causa de muerte y la primera de discapacidad en adultos. Se estima que 1 de cada 4 personas puede tener un EVC en su vida y que cada 4 minutos muere una persona por esa causa. En el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se considera una de las primeras 10 causas de carga global de la enfermedad.

(Foto: https://www.scientificanimations.com/Types of StrokeCC BY-SA 4.0)

El EVC es más frecuente conforme avanza la edad por los cambios propios del envejecimiento en los vasos cerebrales y por el daño de las enfermedades crónicas como la hipertensión y la diabetes, o del estilo de vida como el tabaquismo y la obesidad.

Síntomas:

Los síntomas de un EVC que debe conocer toda la población son:

  • La desviación de la boca

  • Dificultad para hablar o entender 

  • Debilidad de la mitad del cuerpo

También puede haber otros, como alteración en la visión o el equilibrio. Cuando una persona tiene uno de estos síntomas debe acudir de inmediato a urgencias del hospital.  

Factores de riesgo

Con el control adecuado de los factores de riesgo se podrían evitar hasta 8 de cada 10 casos de la enfermedad. El principal factor de riesgo tratable es la hipertensión arterial sistémica mal controlada. Otros factores modificables son la diabetes mellitus, el tabaquismo, la obesidad, el aumento de grasas en sangre, el sedentarismo y las enfermedades cardiacas.

El estilo de vida saludable es fundamental para disminuir la enfermedad, las acciones importantes en la prevención incluyen:

  • Evitar el tabaquismo

  • Hacer ejercicio regular al menos 30 minutos 3 veces por semana

  • Mantener un peso saludable

  • Tener una alimentación balanceada

  • Mantener un control de la presión arterial,  de la glucosa y del colesterol en sangre

Tratamiento 

Cuando un paciente llega a Urgencias por en EVC, es una emergencia tiempo-dependiente. En el EVC isquémico existen dos tratamientos para intentar recuperar la circulación cerebral, uno se aplica por la vena y el otro requiere de un equipo especial, que a través de un catéter intenta retirar el coagulo y recuperar la circulación cerebral.

Los tratamientos del infarto cerebral funcionan mejor cuando más rápido se puede ofrecer el tratamiento y existen algunas contraindicaciones para los mismos.

En México estamos trabajando las diferentes instituciones de salud para mejorar la atención del paciente con EVC y dar un tratamiento más integral e igualitario. Es un reto y existen diferentes barreras para lograrlo. En el IMSS tenemos el protocolo Código Cerebro, que se encuentra dentro de los protocolo de atención integral que estamos promoviendo para estandarizar la atención de los pacientes en nuestra Institución.

Cifras de la enfermedad 

En general, se estima que 30% de los pacientes con EVC fallece, 30% queda discapacitado y solo 30% se recupera. En México, en un estudio mundial de 2010 se encontró que 39% de los pacientes murieron y casi el 50% de los sobrevivientes quedaron discapacitados.

Los pacientes que se tratan en una Unidad con el equipo multidisciplinario y un protocolo bien establecido tienen más probabilidad de recuperarse. La enfermedad vascular cerebral es una prioridad de salud en nuestro país, aún tenemos un gran reto para disminuir el impacto que produce en nuestros pacientes y en nuestra sociedad.

Cada persona puede contribuir al vigilar sus factores de riesgo y procurar tener un estilo de vida más saludable, además de conocer los síntomas de la enfermedad y acudir a Urgencias si se presentan los mismos.