Comúnmente se cree que los pies maltratados, dolorosos o con mal olor, son un problema común que surge por caminar mucho o utilizar un calzado inadecuado.
Sin embargo, aunque en muchos casos esto es cierto, en otros no, pues estos síntomas podrían ser el reflejo de un problema de salud.
Tener unos pies bonitos y suaves no sólo es cuestión de belleza, sino de salud, por lo que hay que estar atento a cualquier cambio que tengan.
Cuando algo no está bien en el organismo, los pies emiten nueve señales. ¡Escúchalos!
(Con información de El País)
Sin embargo, aunque en muchos casos esto es cierto, en otros no, pues estos síntomas podrían ser el reflejo de un problema de salud.
Tener unos pies bonitos y suaves no sólo es cuestión de belleza, sino de salud, por lo que hay que estar atento a cualquier cambio que tengan.
¿Cómo se comunican los pies?
Cuando algo no está bien en el organismo, los pies emiten nueve señales. ¡Escúchalos!
- Calambres: suelen aparecer cuando no se realiza ejercicio correctamente, al estar estresados o por dormir mal. Son más frecuentes por las noches y pueden durar varios minutos. También son síntomas de deficiencia de aporte de sangre a los músculos, alteraciones en los nervios de los pies o diabetes.
- Juanetes: son más comunes en la adolescencia y conforme pasan los años se van agravando. Estos son hereditarios y pueden llegar a deformar el pie, por lo que se deben tomar medidas para detener su progresión. Plantillas, cambios de calzado, vendajes y fisioterapia pueden retrasar su desarrollo, pero para eliminarlos por completo, se requiere cirugía.
- Dolor de talón: puede ser el anuncio de fascitis plantar, una inflamación del ligamento largo que se encuentra bajo la planta del pie. La obesidad, deportes de alto impacto o actividades físicas intensas, son los principales responsables.
- Uñas blancas y huecas: si bien pueden dañarse por el calzado o distintas actividades, también son una señal de enfermedades del corazón, pulmón o riñones. Los hongos son otra causa de su deterioro.
- Hinchazón: posiblemente se trate de un edema, el cual surge por la retención de líquidos o por problemas de circulación de la sangre.
- Puntos rojos y picazón: pueden ser consecuencia de una dermatitis por inflamación e la piel. En esos casos, no hay que rascarse y aplicar crema humectante.
- Dolor en el dedo “gordo”: es una señal común de gota, la cual se presenta cuando los cristales de ácido úrico se acumulan en una articulación.
- Heridas frecuentes y que no sanan: son una señal de diabetes aunque también de una alteración de los nervios, en donde hay menos sensibilidad al dolor.
- Pies fríos: si además se sienten adormecidos, es posible que exista alguna alteración en las arterias que impiden la llegada normal de sangre. Las principales causas de esto son el tabaquismo, predisposición familiar y algunos fármacos.
(Con información de El País)