La obesidad y la soledad se relacionan de manera genética según una nueva investigación de la Universidad de Cambridge y publicada en Nature Communications.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), refiere que México es el país con la mayor tasa de obesidad en población adulta de América Latina, el país además ocupa también el sexto lugar en índice de obesidad en adolescentes y niños. Respecto a la tasa de obesidad en adultos, el porcentaje es de 28.9% para México, seguido por Argentina (28.3%) y Chile (28.0%).
Por otro lado, respecto a la soledad, la Encuesta Nacional de los Hogares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en 2016 los hogares unipersonales aumentaron al 10.2%, es decir, 3 millones 355 mil 800 hogares del país, son unipersonales. De estos el 16.9% son dirigidos por mujeres y en menor porcentaje por hombres (7.6%).
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Los investigadores de la Universidad de Cambridge refieren que la obesidad estaría relacionada genéticamente con la llamada “nueva epidemia”, la soledad o aislamiento social; la obesidad y la soledad son factores de riesgo para desarrollar diversas enfermedades y aumentan el riesgo de muerte prematura.
Al respecto, la investigación develó que existen áreas de genes similares entre la obesidad y la soledad.
Existe un vínculo genético que origina ambas enfermedades; ambas no son producidas únicamente por las experiencias de vida y el entorno.
Los investigadores realizaron un análisis sobre la carga genética de casi 5 mil individuos.
Estos datos se tomaron de la base de datos del Biobanco de Reino Unido.
Se realizó una encuesta para que los participantes mostraran su percepción sobre la soledad y se encontraron diferencias genéticas en su ADN hasta en 15 regiones distintas.
Estas diferencias se encontraron también en los individuos con sobrepeso y obesidad.
En soledad y obesidad, el vínculo se encontró en la región cerebral que se relaciona con el autocontrol emocional.
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Se encontró también que existen determinados genes que incrementan la probabilidad de que los individuos sean más sociables.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), refiere que México es el país con la mayor tasa de obesidad en población adulta de América Latina, el país además ocupa también el sexto lugar en índice de obesidad en adolescentes y niños. Respecto a la tasa de obesidad en adultos, el porcentaje es de 28.9% para México, seguido por Argentina (28.3%) y Chile (28.0%).
Por otro lado, respecto a la soledad, la Encuesta Nacional de los Hogares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en 2016 los hogares unipersonales aumentaron al 10.2%, es decir, 3 millones 355 mil 800 hogares del país, son unipersonales. De estos el 16.9% son dirigidos por mujeres y en menor porcentaje por hombres (7.6%).
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Soledad y obesidad guardan estrecha relación
Los investigadores de la Universidad de Cambridge refieren que la obesidad estaría relacionada genéticamente con la llamada “nueva epidemia”, la soledad o aislamiento social; la obesidad y la soledad son factores de riesgo para desarrollar diversas enfermedades y aumentan el riesgo de muerte prematura.
Al respecto, la investigación develó que existen áreas de genes similares entre la obesidad y la soledad.
Existe un vínculo genético que origina ambas enfermedades; ambas no son producidas únicamente por las experiencias de vida y el entorno.
Los investigadores realizaron un análisis sobre la carga genética de casi 5 mil individuos.
Estos datos se tomaron de la base de datos del Biobanco de Reino Unido.
Se realizó una encuesta para que los participantes mostraran su percepción sobre la soledad y se encontraron diferencias genéticas en su ADN hasta en 15 regiones distintas.
Estas diferencias se encontraron también en los individuos con sobrepeso y obesidad.
En soledad y obesidad, el vínculo se encontró en la región cerebral que se relaciona con el autocontrol emocional.
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Se encontró también que existen determinados genes que incrementan la probabilidad de que los individuos sean más sociables.