El Día Mundial de la Alimentación se celebra cada 16 de octubre, desde el año 1979 y fue proclamado por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), con el objetivo de reducir el hambre en el mundo, propósito compartido además en la Agenda 2030 de Naciones Unidas (NU), en el rubro “Hambre Cero”.
Al respecto, este año, la FAO contempla un factor igual de importante que lograr el acceso a la comida: que la comida sea realmente saludable y cubra los requerimientos del organismo conforme a la edad de cada persona, por ello, la campaña 2019 tiene como eslogan:
“Una alimentación sana para un mundo #HambreCero”.
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¿Por qué una alimentación más sana?
Los datos de la FAO y de la Organización Mundial de la Salud (OMS), indican que la obesidad y el sobrepeso son el sexto factor de riesgo de defunción en el mundo; anualmente 3.4 millones de personas adultas fallecen debido al sobrepeso o a la obesidad.
Aunado a lo anterior, la carga de diabetes ha llegado al 44%, la carga de cardiopatías isquémicas al 23% y la de cardiopatías isquémicas entre el 7 y el 41% la carga de algunos tipos de cáncer que tienen como factores de riesgo principales a la obesidad y al sobrepeso.
En el caso de México, el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), ha publicado un documento titulado: La obesidad en México. Estado de la política pública y recomendaciones para su prevención y control, que representa un esfuerzo de diversos expertos e instituciones del país para difundir una de las problemáticas principales en materia de salud a nivel mundial, como cita el texto:
“En los últimos 30 años, el sobrepeso y la obesidad se han convertido en una epidemia que afecta a uno de cada tres adolescentes y niños, y a siete de cada diez adultos en nuestro país. Combatir y prevenir este fenómeno es un reto urgente en materia de salud pública porque la obesidad impacta negativamente la calidad de vida de quienes la padecen y, además representa una carga muy significativa para el sector salud”.
El caso de México: los datos de la Secretaría de Salud
Respecto a la alimentación saludable, la Secretaría de Salud (Ssa), advierte que hasta el 88% de los países del planeta presentan formas inadecuadas de alimentación, por ello, se requiere de una estrategia de alimentación que comprenda los determinantes sociales de la salud.
¿Dieta planetaria? La Ssa refiere que una dieta planetaria sería aquella constituida por:
- Hasta en un 50% por frutas y verduras
- Entre un 20 y 25 por ciento de granos enteros
- Proteínas preferentemente de origen vegetal (leguminosas y oleaginosas).
Mientras que también se sugerirían cantidades muy pequeñas de tubérculos altos en almidones y grasas, además de la restricción en el consumo de azúcar.
Hambre cero no es suficiente...
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Por lo tanto, la reflexión gira en torno a que, si bien disminuir el hambre en el mundo es un problema prioritario, pues existen hasta 155 millones de menores con desnutrición, la calidad de los alimentos también requiere atención.
Finalmente, otro punto de la reflexión es que la cultura en salud nutricional, deberá considerar la disposición de alimentos, la calidad de los mismos y el sistema de producción.