Adelgazar es el objetivo de millones de mujeres y hombres en todo el mundo, quienes para conseguirlo, comienzan estrictas dietas y fuertes rutinas de ejercicio.
Si bien el ejercicio y la alimentación son los ingredientes principales para perder adelgazar, también es importante realizar otras acciones, ¿cómo cuáles? A continuación te las decimos.
Al despertar, tu cuerpo no tiene el combustible necesario para realizar tus tareas habituales, ya que has pasado entre seis y ocho horas sin comer.
En ese tiempo, tus niveles de insulina bajan, las reservas de proteínas están vacías y tus músculos aclaman nutrición con urgencia.
Para mantener el balance es importante que tengas un buen desayuno con 30 o 35% de tus calorías totales del día.
El mejor desayuno incluye proteínas, granos enteros con vegetales y grasas saludables.
No incluirla provocará que consumas músculo, lo que no es bueno si quieres bajar de peso.
La proteína la puedes encontrar en la carne, huevos, queso o leche.
La porción correcta es 1.18 a 2.20 gramos por cada kilo de peso corporal para mantener la masa muscular y eliminar las calorías.
Inclúyelas en las comidas y colaciones para que obtengas todos los nutrientes que promuevan el músculo y ataquen la grasa como sea posible.
Lo recomendable es comer una porción en cada comida o consumirlos como snacks.
Este platillo brinda los nutrientes necesarios que ayudan a tener buena salud, bajar de peso y que son difíciles de obtener de otras fuentes.
Si comes antes de tu entrenamiento, acelerarás tu crecimiento muscular y si lo haces al terminar, proveerás a tus músculos de suficiente energía para aumentar la fuerza.
Otro beneficio es que quemarás más grasa durante la práctica y las siguientes 24 horas.
Puedes comer un snack con carbohidratos y proteína 30 minutos antes del entrenamiento y una comida completa con proteína al finalizar.
(Con información de Women’s Health)
Si bien el ejercicio y la alimentación son los ingredientes principales para perder adelgazar, también es importante realizar otras acciones, ¿cómo cuáles? A continuación te las decimos.
Desayuna todos los días
Al despertar, tu cuerpo no tiene el combustible necesario para realizar tus tareas habituales, ya que has pasado entre seis y ocho horas sin comer.
En ese tiempo, tus niveles de insulina bajan, las reservas de proteínas están vacías y tus músculos aclaman nutrición con urgencia.
Para mantener el balance es importante que tengas un buen desayuno con 30 o 35% de tus calorías totales del día.
El mejor desayuno incluye proteínas, granos enteros con vegetales y grasas saludables.
Incluye proteína en tus comidas y colaciones
No incluirla provocará que consumas músculo, lo que no es bueno si quieres bajar de peso.
La proteína la puedes encontrar en la carne, huevos, queso o leche.
La porción correcta es 1.18 a 2.20 gramos por cada kilo de peso corporal para mantener la masa muscular y eliminar las calorías.
Come frutas y verduras
Inclúyelas en las comidas y colaciones para que obtengas todos los nutrientes que promuevan el músculo y ataquen la grasa como sea posible.
Lo recomendable es comer una porción en cada comida o consumirlos como snacks.
Consume más ensaladas
Este platillo brinda los nutrientes necesarios que ayudan a tener buena salud, bajar de peso y que son difíciles de obtener de otras fuentes.
Come antes y después de hacer ejercicio
Si comes antes de tu entrenamiento, acelerarás tu crecimiento muscular y si lo haces al terminar, proveerás a tus músculos de suficiente energía para aumentar la fuerza.
Otro beneficio es que quemarás más grasa durante la práctica y las siguientes 24 horas.
Puedes comer un snack con carbohidratos y proteína 30 minutos antes del entrenamiento y una comida completa con proteína al finalizar.
(Con información de Women’s Health)