El día primero de octubre de 2019 marcará una nueva etapa para la salud de los consumidores en México y también para la política alimentaria del país: el etiquetado de advertencia será aprobado en la Cámara de Diputados.
En el documento: “El etiquetado de alimentos y bebidas: la experiencia en México” elaborado por Karina Sánchez, Nydia Balderas, Ana Munguía y Simón Barquera, del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), los especialistas señalan que el etiquetado frontal es la única fuente de información con la que cuenta el consumidor dentro de los puntos de venta, por ello, se trata de un sistema que influye en las alternativas de alimentos industrializados, particularmente en México, un país con una población con altos índices de sobrepeso y obesidad.
En dicho documento, publicado durante marzo de 2018, se indica que la regulación actual en materia de etiquetado es la Norma Oficial Mexicana (NOM-051): “Especificaciones generales de etiquetado para alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados- Información comercial y sanitaria” que fue modificada en el año 2014 en la cual se establece que los productos industrializados deben presentar una declaración nutrimental obligatoria que se sitúa en el área frontal de exhibición.
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Después de muchos esfuerzos, etiquetado nutrimental en México será modificado
En esta declaración se pide presentar la cantidad y porcentaje del aporte calórico de grasas saturadas, otras grasas y azúcares totales (kcal o cal), porcentaje de sodio (mg); y energía (kcal o cal) por porción o envase, según sea el caso.
El etiquetado frontal nutrimental vigente en México hasta el momento, está basado en el sistema de guías diarias de alimentación (GDA).
Al respecto, especialistas, académicos nacionales e internacionales, legisladores, sociedad civil y hasta la Secretaría de Salud (Ssa) de México, han pedido y avalado un etiquetado frontal de advertencia que ya ha sido implementado en países como Uruguay, Chile y Perú y que se ha convertido en la política regulatoria más exitosa para reducir el consumo de alimentos y bebidas que exceden las recomendaciones de sodio, azúcares y grasas saturadas.
En ese sentido, Juan Ángel Rivera Dommarco, director general del INSP enfatiza que el etiquetado de advertencia en los alimentos procesados es de gran relevancia en México ante la epidemia de diabetes y obesidad: más del 74% de los adultos y un tercio de los niños y adolescentes tienen sobrepeso u obesidad, las cuales pueden causar enfermedades cardiovasculares, hasta 14 tipos de cáncer distintos y diabetes.
En su colaboración publicada en REFORMA, Dommarco explicó que la alimentación no saludable, es decir, aquella con altos niveles de sodio, azúcar, grasas saturadas y calorías, es el principal factor de riesgo que ocasiona mayor cantidad de muertes prematuras y enfermedades.
¿Qué es el etiquetado de advertencia?
El especialista también detalló que el etiquetado de advertencia en los alimentos consiste en colocar al frente de los empaques de alimentos procesados, un octágono negro por cada ingrediente no saludable que se encuentre en exceso en los productos, lo anterior responde al propósito de orientar a los consumidores en el momento de sus compras.
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Antecedentes. El etiquetado de advertencia fue publicado originalmente en Chile donde las evaluaciones han mostrado resultados favorables y hasta la industria alimentaria ha modificado sus productos para evitar dicha etiqueta, por ello, el director general del INSP señaló al etiquetado de emergencia como:
“un etiquetado claro para proteger la salud de nuestros hijos y garantizar el derecho de conocer la calidad de lo que comemos”.
Finalmente, el etiquetado actual disponible en México (GDA) es complejo y difícil de entender y precisamente la crítica va hacia la poca efectividad del mismo para la orientación alimentaria y la influencia positiva en las decisiones alimentarias cotidianas.
Hasta el momento, se había identificado como un modelo que podía ser fácilmente conducido por distintos intereses que nada tienen que ver con la prevención de enfermedades y el cuidado de la salud.
Y tú, ¿entiendes la etiqueta de tus alimentos?