Sufrir calambres nocturnos es algo muy doloroso y desagradable, sobre todo porque es común que aparezcan en medio de la noche, cuando no puedes gritar de dolor como quisieras. Así que para que dejes de morder la almohada, te damos unos trucos para evitar calambres nocturnos.
Los calambres nocturnos son contracciones musculares dolorosas que aparecen mientras estamos dormidos.
Usualmente aparecen en las pantorrillas o en los muslos, aunque también pueden aparecer en las plantas de los pies, en el cuello, abdomen y hasta en las manos.
En cuanto a la duración de los calambres nocturnos, estos suelen afectar al cuerpo por algunos segundos, aunque en algunos casos pueden durar minutos enteros.
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Cualquier persona puede sufrir calambres nocturnos pero con la edad, el riesgo de sufrirlos es mayor.
De acuerdo al doctor José Luis Sánchez Mejía, experto en ortopedia y traumatología, son más comunes en deportistas y mujeres embarazadas, aunque las causas del calambre nocturno también están relacionadas con el hecho de estar sentado o parado mucho tiempo.
Sin embargo, la mala alimentación también puede ser un factor de riesgo, ya que no tomar suficiente agua ni consumir alimentos ricos en potasio puede volver más frecuentes los episodios de calambres nocturnos.
"La causa de los calambres es la excitación excesiva de los músculos, que puede ser por actividad física vigorosa, deshidratación, cambios hidroelectrolíticos, venas varicosas y sedentarismo", subraya el especialista.
Otras causas pueden ser:
Dormir en una mala postura, sentarse en una posición incorrecta, niveles de potasio y magnesio bajos, ejercicio en exceso, uso de calzado inadecuado.
Come bien
Enfócate en la calidad de alimentos que consumes, tienes que comer alimentos con potasio, especialmente kiwi y plátano.
Sánchez Mejía aclara que a pesar de no estar demostrado de forma científica que el consumo de plátano reduzca los calambres, sus ingredientes como potasio, agua e hidratos de carbono en forma de glucosa, favorecen a las personas que realizan ejercicio, ya que en la actividad física se emplea mucha azúcar.
Evita las grasas y productos de bollería industrial porque elevan el riesgo de un calambre nocturno.
Hidrátate
Toma la cantidad necesaria de agua, tampoco te excedas porque puedes perder electrolitos en tu cuerpo y causar calambres.
Procura tomar un vaso de agua antes de dormir y si haces ejercicio, asegúrate de estar tomando el agua necesaria.
Date masajes
Un remedio casero efectivo para evitar un calambre nocturno es hacer un masaje en las piernas con aceites naturales como de pino, eucalipto, tomillo o romero. Aplícalos en la zona donde frecuentemente tienes calambres.
>>Cómo aliviar el dolor muscular en pocos minutos
Usa zapatos cómodos
Elige un calzado diario que tenga un buen soporte para tus pies y si usas tacones, da un masaje en tus pies y piernas al quitarte los zapatos. También procura estirarte un poco antes de dormir.
Ejercicio constante
Practicar ejercicio regular es muy bueno, solo evita cambios bruscos en el ritmo para no forzar a tus músculos y causar un calambre nocturno.
Puedes hacer ejercicios simples pero efectivos como caminar a paso rápido al menos 45 minutos al día.
¡Ojo! Si sufres calambres frecuentes sin haber hecho ejercicio vigoroso acompañado de una molestia intensa, hinchazón, enrojecimiento y debilidad muscular, debes consultar a un médico, puede tener relación con arterioesclerosis que puede generar un dolor similar.
"Salvo que se presenten en una forma muy frecuente no son nada que nos deba preocupar en exceso. Pero si son muy frecuentes, pueden estar escondiendo alguna enfermedad", alerta el especialista.
>>Te puede interesar: Tres claves para mejorar la resistencia muscular
(Con información de Notimex y Bekia)
Los calambres nocturnos son contracciones musculares dolorosas que aparecen mientras estamos dormidos.
Usualmente aparecen en las pantorrillas o en los muslos, aunque también pueden aparecer en las plantas de los pies, en el cuello, abdomen y hasta en las manos.
En cuanto a la duración de los calambres nocturnos, estos suelen afectar al cuerpo por algunos segundos, aunque en algunos casos pueden durar minutos enteros.
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Causas de los calambres nocturnos
Cualquier persona puede sufrir calambres nocturnos pero con la edad, el riesgo de sufrirlos es mayor.
De acuerdo al doctor José Luis Sánchez Mejía, experto en ortopedia y traumatología, son más comunes en deportistas y mujeres embarazadas, aunque las causas del calambre nocturno también están relacionadas con el hecho de estar sentado o parado mucho tiempo.
Sin embargo, la mala alimentación también puede ser un factor de riesgo, ya que no tomar suficiente agua ni consumir alimentos ricos en potasio puede volver más frecuentes los episodios de calambres nocturnos.
"La causa de los calambres es la excitación excesiva de los músculos, que puede ser por actividad física vigorosa, deshidratación, cambios hidroelectrolíticos, venas varicosas y sedentarismo", subraya el especialista.
Otras causas pueden ser:
Dormir en una mala postura, sentarse en una posición incorrecta, niveles de potasio y magnesio bajos, ejercicio en exceso, uso de calzado inadecuado.
5 trucos para evitar calambres nocturnos
Come bien
Enfócate en la calidad de alimentos que consumes, tienes que comer alimentos con potasio, especialmente kiwi y plátano.
Sánchez Mejía aclara que a pesar de no estar demostrado de forma científica que el consumo de plátano reduzca los calambres, sus ingredientes como potasio, agua e hidratos de carbono en forma de glucosa, favorecen a las personas que realizan ejercicio, ya que en la actividad física se emplea mucha azúcar.
Evita las grasas y productos de bollería industrial porque elevan el riesgo de un calambre nocturno.
Hidrátate
Toma la cantidad necesaria de agua, tampoco te excedas porque puedes perder electrolitos en tu cuerpo y causar calambres.
Procura tomar un vaso de agua antes de dormir y si haces ejercicio, asegúrate de estar tomando el agua necesaria.
Date masajes
Un remedio casero efectivo para evitar un calambre nocturno es hacer un masaje en las piernas con aceites naturales como de pino, eucalipto, tomillo o romero. Aplícalos en la zona donde frecuentemente tienes calambres.
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Usa zapatos cómodos
Elige un calzado diario que tenga un buen soporte para tus pies y si usas tacones, da un masaje en tus pies y piernas al quitarte los zapatos. También procura estirarte un poco antes de dormir.
Ejercicio constante
Practicar ejercicio regular es muy bueno, solo evita cambios bruscos en el ritmo para no forzar a tus músculos y causar un calambre nocturno.
Puedes hacer ejercicios simples pero efectivos como caminar a paso rápido al menos 45 minutos al día.
¡Ojo! Si sufres calambres frecuentes sin haber hecho ejercicio vigoroso acompañado de una molestia intensa, hinchazón, enrojecimiento y debilidad muscular, debes consultar a un médico, puede tener relación con arterioesclerosis que puede generar un dolor similar.
"Salvo que se presenten en una forma muy frecuente no son nada que nos deba preocupar en exceso. Pero si son muy frecuentes, pueden estar escondiendo alguna enfermedad", alerta el especialista.
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(Con información de Notimex y Bekia)