La alcachofa de Jerusalén, también conocida como tupinambo, topinambur o girasol de Jerusalén y es un tubérculo que tiene su origen en el sur de América, como México.
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Su sabor es ligeramente dulce, muy similar al de la alcachofa. Este tubérculo es considerado como un superalimento debido a sus beneficiosas propiedades nutricionales, así como por su versatilidad culinaria. ¿Sabías de su existencia? Te lo presentamos a continuación.
Propiedades de la alcachofa de Jerusalén
La alcachofa de Jerusalén, de acuerdo con Ecoagricultor, es una hortaliza de tubérculo de la familia de las compuestas originaria de México. Se trata de un alimento que contiene pocas calorías y una gran cantidad de valores nutrimentales.
La alcachofa de Jerusalén se caracteriza por ser parecido a un jengibre, pero arrugado, con una corteza amarillenta y toques violáceos, cuyo sabor ligeramente dulce recuerda al de la alcachofa, a los espárragos e incluso a la trufa, según el portal Clara.
Este tubérculo cuenta con un alto contenido de inulina, fibra natural que ayuda a regular los niveles de azúcar y colesterol en la sangre. También cuenta con una buena cantidad de vitamina C, D, A, B1, B2, B6 y B9, así como minerales como hierro, potasio, magnesio, sodio, calcio y fósforo.
"Se le considera un superalimento porque tiene valiosas propiedades nutricionales que pueden mejorar la salud”, señala la Dra. Angela Méndez-Yáñez, quien participó en la revisión bibliográfica sobre este tubérculo realizada por investigadores de la sede Talca de la Universidad Autónoma de Chile, para el portal Clara.
Beneficios de la alcachofa de Jerusalén para el cuerpo
La alcachofa de Jerusalén contiene muchos beneficios para la salud, tanto por su composición química como por sus propiedades medicinales. Algunos de los beneficios de este alimento, según con Hogarmanía son:
- Regula los niveles de colesterol y azúcar en sangre
Los valores de triglicéridos, colesterol y azúcar en sangre disminuyen por la presencia de la inulina en este tubérculo. Se trata de un carbohidrato alternativo que no se descompone en el cuerpo, por lo que es un alimento perfecto para personas que tienen un diagnóstico de diabetes.
- Fortalece el sistema inmunológico
Debido a que contiene muchos minerales como magnesio, sodio, calcio, potasio, hierro, fósforo y calcio, el sistema inmunológico se refuerza. También destaca por contar con propiedades antitumorales, limpiadoras del tracto intestinal que alivian el estreñimiento.
- Alimento prebiótico
La inulina que contiene este tubérculo actúa como prebiótico (de forma más efectiva que el kéfir y el yogurt), provocando la proliferación de bacterias buenas en el colon conocidas como probióticos. Juega un papel importante en la prevención de enfermedades óseas, debido a que ayuda a absorber el calcio.
- Poder saciante
Se puede incluir en dietas para controlar tu peso, ya que este alimento proporciona una sensación de saciedad, además de tener pocas calorías. Además, tampoco contiene gluten, lo que ayuda a las personas intolerantes a esta proteína o celiacos a disfrutar de los beneficios de este tubérculo.
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