El lanzamiento del nuevo iPhone se caracteriza por tener una triple cámara trasera que simula la figura que forman las semillas de flor de loto. Esta famosa flor ha despertado una curiosa afección en miles de personas: la tripofobia.
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¿Qué es la tripofobia que puede causar el iPhone?
La tripofobia es muy común y se detona cuando la persona observa un conjunto de agujeros de tamaño similar que se encuentran pegados entre sí.
Ver este patrón provoca sensación de ansiedad, miedo y repulsión, algunos incluso pueden sufrir taquicardia, náuseas, temblores, dificultad para respirar, dolor de cabeza, comezón y sentir que se les enchina la piel.
Existen dos tipos de tripofobia, el primero es en la piel, y está relacionado con sentir miedo a erupciones o afecciones cutáneas que se ven como patrones.
El segundo tipo se denomina tripofobia extrema y en estos casos quien la padece presenta muy bajo nivel de tolerancia para observar patrones de diversos tipos, como panales de abeja y gusaneras.
Quienes padecen este tipo de tripofobia pueden ver afectado su desarrollo, ya que encontrar alguna imagen que desate el temor puede bloquear algunas de sus actividades en la vida cotidiana.
Aunque esta fobia ha cobrado popularidad desde hace algunos años, no está reconocida en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, debido a que no existen los estudios suficientes sobre el tema. Se estima que esta condición afecta aproximadamente al 25% de la población mundial.
Foto: Apple MacStore
Los nuevos iPhone con tres cámaras que dibujan una inquietante estructura son una pesadilla para quienes tienen fobia a los agujeros porque causa efectos como:
- Acelerar el ritmo cardiaco
- Causar ganas de vomitar
- Provocar mareos
- Erizar la piel
Arnold Wilkins y Geoff Cole, investigadores de la Universidad de Essex, explican que la repulsión a esas formas y patrones podría tratarse de un mecanismo de defensa ante algunos animales potencialmente mortales, como las arañas, serpientes y escorpiones.
La aversión es una adaptación evolutiva que tienen que ver con la preservación individual.
Según los investigadores esta fobia al patrón repetitivo no se puede diagnosticar clínicamente, sin embargo, todos la padecemos en cierto grado.
(Con información de BBC Mundo)