Una nueva investigación acaba de revelar que tener autismo o Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) implicaría un mayor riesgo de muerte prematura en las personas que padecen cualquiera de estas afecciones.
El análisis tuvo como objetivo observar si las personas con trastorno del espectro autista (TEA) o trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH) presentan un mayor riesgo de morir en comparación con la población general y esto fue lo que encontraron.
Riesgo de muerte prematura sería mayor en aquellos con autismo o TDAH
Para llegar a sus conclusiones en su estudio sobre el riesgo de muerte prematura (señalada en la investigación como muerte en la infancia o en la mediana edad), los especialistas llevaron a cabo una revisión sistemática y metanálisis de 27 estudios previos que informaban razones de tasa de mortalidad (RR) en personas con autismo o TDAH y/o sus familiares de primer grado en comparación con la población “normal”.
En total, fueron examinados un total de 642 mil 260 individuos a los que se les buscó la mortalidad por todas las causas en asociación con TEA o TDAH como primer resultado y la mortalidad por causas específicas como resultado secundario.
“Al examinarse las causas de muerte, los trastornos de autismo y déficit de atención/hiperactividad se relacionaron con una mayor mortalidad por causas no naturales (lesiones, envenenamiento y otras), y solo las personas con autismo tenían un mayor riesgo de mortalidad por causas naturales de muerte (como los trastornos neurológicos, del sistema respiratorio y cáncer)”, mencionaron los especialistas en el artículo original sobre el riesgo de muerte prematura que llegan a tener las personas afectadas por estos trastornos de inicio en la niñez.
Entre las personas con autismo, se incrementaron las muertes por causas naturales (4 estudios) y las muertes por causas no naturales (6 estudios), pero si bien entre los afectados con déficit de atención e hiperactividad los decesos por causas naturales no se incrementaron de manera significativa (4 estudios), los investigadores detallan que los fallecimientos por causas no naturales fueron más elevados de lo esperado (10 estudios).
De esta manera, se encontró que las personas con TEA o TDAH tenían un mayor riesgo de muerte prematura en la infancia o en la mediana edad dos veces mayor a la población normal en causas naturales y no naturales.
Tenerlos no solo afecta a la persona, sino que también repercute en el entorno de los afectados. Los especialistas señalan que, conforme ha ido pasando el tiempo, se ha descubierto que los dos trastornos se encuentran relacionados con deficiencias funcionales psicosociales y una variedad de resultados adversos en los pacientes y su entorno familiar.
“Los decesos de personas con trastornos mentales han sido analizados en múltiples investigaciones epidemiológicas, lo que sugiere que los afectados con estos trastornos pueden experimentar una reducción significativa en la esperanza de vida, con mayores tasas de mortalidad en la población general”, concluyeron los expertos.