MI VIDA NO TIENE SENTIDO

¿Qué hacer si siento que mi vida no tiene sentido, según la psicología?

Sentir que la vida no tiene sentido es más común de lo que parece, según la psicología. Pero, ¿qué hacer si mi vida no tiene sentido?

Sentir que la vida no tiene sentido es más común de lo que parece, según la psicología.
Mi vida no tiene sentido.Sentir que la vida no tiene sentido es más común de lo que parece, según la psicología.Créditos: Canva
Escrito en MENTE SANA el

Si te ha pasado que a veces te descubres en una rutina que se repite sin entusiasmo, o te invade la sensación de vacío pese a tener “todo lo necesario”. No te preocupes, sentir que la vida no tiene sentido es más común de lo que parece, según la psicología. Pero, ¿qué hacer si mi vida no tiene sentido?

¿Qué hacer si mi vida no tiene sentido, según la psicología?

Psych Center señala que existen herramientas, avaladas por la psicología, que pueden ayudarte a reconectar con el propósito y el sentido vital. Es decir, cuando sientes que tu vida no tiene sentido. Y algunas de ellas son:

1. Vive con intención. Una de las prácticas más poderosas para recuperar el rumbo es vivir con intención. Esto implica tomar conciencia de por qué haces lo que haces y si tus decisiones diarias están alineadas con tus valores. El camino hacia una vida intencionada empieza con preguntas profundas:

  • ¿Qué me provoca verdadera alegría?
  • ¿Qué actividades despiertan mi curiosidad o pasión?
  • ¿Qué significa el éxito para mí?
  • ¿Cómo quiero sentirme al final del día?

Durante este proceso, puede ayudarte reducir las distracciones, como el exceso de redes sociales, y practicar el diálogo interno positivo. La intención no siempre surge de grandes revelaciones, a veces está en los pequeños ajustes cotidianos.

2. Cultiva la gratitud. Diversos estudios demuestran que practicar la gratitud mejora el bienestar emocional y puede ayudarte a ver tu vida desde una perspectiva más compasiva y esperanzadora. Incorpora la gratitud a tus días con pequeños actos:

  • Escribe cartas a personas que han influido positivamente en tu vida.
  • Haz una lista diaria de cosas por las que estás agradecido.
  • Haz pausas conscientes para notar lo bueno, incluso en lo simple.
  • Incluye la gratitud en tus oraciones o rituales personales.

Este hábito, además de elevar el ánimo, puede ayudarte a resignificar experiencias difíciles.

3. Encuentra sentido en lo cotidiano. Según la psicóloga clínica Noelle Nelson, dar significado a una acción consiste en reconocer su valor. Desde preparar tu café por la mañana con atención plena hasta abrazar a un ser querido no por costumbre, sino como acto de conexión auténtica. 

4. Rodéate de vínculos positivos. Las relaciones significativas son una fuente potente de sentido. Pasa tiempo con personas que te nutran emocionalmente, que celebren tus logros y te sostengan en los tropiezos. También puedes reconectar con tu historia a través de la nostalgia: mirar fotos antiguas, escuchar música de momentos felices, o escribir sobre eventos que te marcaron positivamente. La nostalgia, bien enfocada, puede reforzar tu sentido de pertenencia y continuidad.

5. Pide ayuda profesional. Buscar sentido no es una carrera en solitario. Si sientes que el vacío persiste, un psicólogo o terapeuta puede acompañarte a explorar y entender lo que estás viviendo. Especialmente si hay síntomas como tristeza profunda o falta de motivación, pedir ayuda es un acto de autocuidado.

Sentir que la vida no tiene sentido es más común de lo que parece, según la psicología. Crédito: Canva.

En resumen, no hay una fórmula única para encontrarle sentido a la vida, pero sí caminos posibles. Vivir con intención, agradecer, conectar con los demás y pedir ayuda cuando lo necesites, pueden ser los primeros pasos hacia una vida con propósito, según la psicología.