¿Las personas con Alzheimer pueden hacer ejercicio? Llevar una vida activa es importante para todas las personas sin importar su edad o condición de salud.
Los beneficios del ejercicio son muchos, algunos inmediatos y otros se consiguen con el paso del tiempo. De los primeros destaca el beneficio al cerebro, ya que la actividad física mejora las habilidades para pensar y menos sentimientos de ansiedad.
Es por eso que las personas adultas mayores también deben hacer ejercicio aunque este no tiene que ser ni de la misma intensidad o tipo que el de las personas más jóvenes.
El ejercicio no solo ayuda a mantener un peso sano, sino que impacta en todos los sistemas del cuerpo, y para las personas con demencia, influye directamente sobre la salud cerebral.
¿Se puede hacer ejercicio con Alzheimer?
El ejercicio no va a curar la enfermedad de Alzheimer, pero sí puede mejorar el estado anímico de quienes la padecen. Asimismo también puede disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.
(Foto: Especial)
Si te preocupa lastimarte mientras haces ejercicio, no te preocupes, muchas actividades físicas son de bajo impacto, lo que significa que son amigables con las articulaciones y los huesos. Un estudio de seis años de duración demostró que el ejercicio puede ralentizar la enfermedad y mejorar la memoria y el estado de ánimo.
Además de que ayuda especialmente a las personas que se encuentran en las fases intermedias de la enfermedad a llevar una vida más independiente. Las personas que hacen ejercicio con regularidad están menos estresadas, ansiosas y deprimidas. Incluso en fases avanzadas de la enfermedad, unos músculos más fuertes pueden ayudar a alguien a hacer más cosas por sí mismo.
¿Qué ejercicios puedes hacer con Alzheimer?
Empieza poco a poco, tal vez con unos 10 minutos al día y elige una actividad divertida de hacer. No te olvides de calentar los músculos y las articulaciones. Si el equilibrio es un problema, haz ejercicios de calentamiento sentado. Por ejemplo, cruza las piernas y gira los tobillos 10 veces en cada dirección.
- Tai chi: El tai chi consiste en ejercicios suaves y estiramientos. Puede ayudar a pensar con más claridad y reforzar la memoria. Además, no daña las articulaciones y puede practicarse en casa o al aire libre.
- Jardinería: La jardinería es una forma estupenda de mantenerse activo al aire libre. También estimula los sentidos, crea un sentido de propósito y puede ser una rica fuente de recuerdos para las personas que aman las plantas.
- Natación: Hacer ejercicio en el agua es una de las mejores actividades que puedes hacer ya que es amigable con las articulaciones y es muy relajante.
- Yoga: El yoga puede aliviar el estrés y aumentar la fuerza y la flexibilidad. Investigadores de la UCLA descubrieron que las personas que practicaban yoga durante tres meses tenían mejor memoria que las que hacían otros "ejercicios para mejorar la memoria", como crucigramas.
- Caminata: Caminar ayuda a prevenir enfermedades cardiacas y diabetes, entre otras afecciones. También puede mejorar la memoria y la capacidad de pensar.
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(Con información de WebMD)