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El impacto de tener un familiar con Alzheimer

El Alzheimer es un trastorno que no solo padece la persona enferma, sino toda la familia

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El Alzheimer es un trastorno crónico, irreversible y progresivo que tiene como principal característica la pérdida de memoria. Quienes lo padecen, poco a poco van olvidando quiénes son sus familiares e incluso, quiénes son ellos mismos. ¿Cómo impacta tener un familiar con Alzheimer?

Ver cómo una persona cercana a nosotros poco a poco va olvidando quién es puede tener un impacto importante, especialmente si se trata de un familiar cercano como el padre o la madre, por lo que es importante saber cómo actuar en esos casos.

Tener un familiar con Alzheimer

De acuerdo a la Dra. María del Rosario Martínez, Jefa del Servicio de Geriatría del Hospital Juárez de México (HJM), el Alzheimer es un tipo de demencia que causa un deterioro cognitivo mayor.

Se conoce como un padecimiento que causa alteraciones de memoria, de juicio y para lograr hacer cálculos mentales.

Sin embargo, la principal característica es que causa problemas de memoria.

Como es una enfermedad progresiva, es decir, que va empeorando con el tiempo, puede comenzar con pequeños olvidos hasta llegar a problemas de conducta como desvestirse cuando no es apropiado, desconocer objetos cotidianos como los cubiertos para comer o incluso, salir de casa y no saber cómo volver.

“También puede haber alteraciones para caminar y hasta problemas para controlar las ganas de hacer del baño, porque los pacientes pierden el control de los esfínteres”, indica la especialista.

El Alzheimer tiene diversas fases: leve, moderada y severa. La clasificación dependerá de la zona cerebral que esté afectada.

Respecto a las causas, la especialista señala que el Alzheimer está asociado con la edad, siendo este el principal factor de riesgo. A mayor edad, mayor riesgo de padecer problemas de demencia.

Sin embargo, ser mayor no es la única causa, también incluyen otros factores como:

Padecer hipertensión, diabetes así como colesterol y triglicéridos altos

Falta de ejercicio (sedentarismo)

Genética

Mala alimentación

En los casos donde la genética influye como factor para la enfermedad, puede presentarse lo que se conoce médicamente como Alzheimer temprano, donde los pacientes empiezan a manifestar síntomas desde los 45 años de edad.

Los pacientes que sufren la enfermedad, generalmente mueren por complicaciones asociadas, no como tal por el Alzheimer.

“Los pacientes se vuelven totalmente dependientes y son más susceptibles a otras enfermedades como neumonía, úlceras y problemas de deglución o para comer”, señala la especialista del HJM.

Por ello, tener un familiar con Alzheimer puede impactar y cambiar en gran manera la vida, porque la persona que conocemos deja de estar ahí y depende completamente de nosotros.

Recomendaciones para familiares 

En ese sentido, la experta señala una serie de consejos para afrontar de mejor manera la situación:

1. Conocer el diagnóstico

Es importante conocer perfectamente el tipo de Alzheimer que padece nuestro familiar, informarse es clave para tomar las decisiones más acertadas. Se debe estar consciente de que es una enfermedad que no se cura y que va progresando con el tiempo.

2. Tomar con calma algunos cambios

Es probable que nuestro familiar con Alzheimer comience a tener cambios de estado de ánimo y que incluso desconozca quienes somos, sin embargo, es normal en este trastorno y es fundamental tomarlo con calma, no desesperarse.

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3. Capacitarse

La experta del Hospital Juárez señala que es de mucha importancia capacitarse acerca de los cuidados ideales para una persona con Alzheimer, así como de la administración de los medicamentos.

En estos casos, puede ayudar acercarse a asociaciones civiles que brindan apoyo y capacitación para familiares con Alzheimer.

4. Acercarse a la psicogeriatría

La familia debe recibir apoyo psicológico para afrontar el duelo de ver cómo el paciente poco a poco va olvidando quién es. El apoyo de expertos ayuda a sobrellevar la situación para no vivir el proceso de manera traumática.

5. Tomar un descanso

Aunque quieras estar todo el tiempo al pendiente de tu familiar con Alzheimer, no es lo más recomendable, ya que podrías sufrir algo denominado colapso del cuidador.

Lo mejor es que busques algunas estancias donde puedan cuidar a tu familiar al menos un par de días a la semana, para que descanses y realices otras actividades ajenas al cuidado de tu familiar.

¿Cómo envejecer de manera saludable?

Como en todos los padecimientos, lo más importante es la prevención, por lo que la doctora Martínez hace hincapié en que desde la juventud, se deben adoptar estilos de vida saludables que ayuden a tener un envejecimiento saludable.

En ese sentido, es necesario hacer ejercicio, tener un control de enfermedades metabólicas como diabetes e hipertensión y realizar actividades que estimulen las funciones cognitivas.

“Aprender un idioma, a tocar un instrumento musical, resolver sopas de letras o sudoku pueden ayudar a mantener las funciones cerebrales”, indica la experta.

En caso de ya tener Alzheimer pero en una etapa inicial, estos ejercicios también pueden ser efectivos, aunque no deben realizarse con demasiada frecuencia porque podrían causar frustración si no se resuelven rápidamente o como se espera.

El ejercicio físico también es fundamental, y la doctora Martínez señala que los mejores ejercicios para personas mayores que deseen mantener sanas sus funciones cognitivas son el tai chi, el yoga y las caminatas.

Se recomienda hacer entre 45 minutos y una hora de estas actividades.

Finalmente, la experta hace hincapié en que el Alzheimer no se cura y que la persona que lo padece no aprende de nuevo lo que ya olvidó. Los tratamientos solo funcionan en etapas iniciales y disminuyen la progresión del trastorno, así como las alteraciones de conducta.

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