“El hígado graso no alcohólico es un padecimiento muy frecuente en la población mexicana, se presenta en mayor medida en mujeres, aunque a nivel Latinoamérica tiene mayor prevalencia en hombres”, el doctor Nahum Méndez Sánchez dió esta explicación durante la sesión del simposio de la Academia Nacional de Medicina de México.
La sesión titulada “Hígado graso asociado a la disfunción metabólica” fue coordinada por el doctor Méndez Sánchez, quién explicó algunos factores de riesgo para padecer hígado graso; genética, sobrepeso, padecer diabetes y tener alto el colesterol y triglicéridos.
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“Los individuos con diabetes y obesidad son muy propensos a padecer hígado graso no alcohólico”, explicó el doctor.
Prevalencia por género y región
La “epidemiología y factores de riesgo genéticos y epigenéticos”, fue la ponencia que dictó el hepatólogo Norberto Chávez Tapia, quien destacó que lamentablemente Latinoamérica es la región más afectada por este padecimiento.
“Calculamos que el 2050 van a existir muchos problemas de salud y una alta prevalencia de hígado graso asociado a la disfunción metabólica”, explicó Chávez Tapia y agregó que “México tiene un fenotipo que favorece la presencia de hígado graso no alcohólico”.
En el caso de las mujeres, el doctor Nahum Méndez Sánchez explicó que en el país “la población que más presenta obesidad son las mujeres, por lo tanto son más propensas a padecer hígado graso” y reiteró que el hígado graso es un padecimiento multifactorial.
En el caso de las mujeres se suma el hecho de que los factores hormonales y metabólicos y quienes padecen el síndrome de ovario poliquístico es un grupo en riesgo de presentar hígado graso no alcohólico.
El síndrome metabólico
El doctor Carlos Aguilar Salin, explicó que el síndrome metabólico es un padecimiento que se constituye por factores como el sobrepeso, los niveles de triglicéridos, los niveles de colesterol, y los niveles de glucosa; las personas con hígado graso presentan las alteraciones mencionadas.
Norverto Chávez Tapia citó un estudió donde se demostró que “la personas delgadas con hígado graso tienen mayor prevalencia de mortalidad”, con ello se demuestra que aunque el padecimiento es más frecuente en personas con obesidad, es más letal en personas delgadas.
El tratamiento
La doctora Graciela Castro hizo énfasis en que aún “no tenemos un medicamento específico para el hígado graso, el tratamiento es dependiendo a los otros padecimientos que afectan a los pacientes”, por lo tanto los pacientes requieren tratamientos individualizados y se les recomienda mejorar su dieta y estilo de vida.
De acuerdo con la Revista Gastroenterología México. "El tratamiento actual de la enfermedad por hígado graso no alcohólico se debe basar en las medidas higiénico-dietéticas”.
No obstante la Revista Gastroenterología México, advierte que “hasta el momento no contamos con tratamientos aprobados por las agencias regulatorias para esta entidad, y los únicos tratamientos recomendados por las sociedades internacionales por tener suficiente evidencia son la pioglitazona y la vitamina E, que no están exentas de efectos adversos".
El doctor Nahum Méndez Sánchez concluyó que llevar una dieta sana y estilo de vida saludable, ayuda a controlar o prevenir el hígado graso no alcohólico. En el caso de quienes ya lo presentan se deben controlar las alteraciones del síndrome metabólico, debido a que es la clave para tratar el padecimiento.