La primera vez que Isa Tamayo se dio cuenta de que su hija, Luz Gabriela, tenía alergias, fue en diciembre de 2020, cuando la pequeña de 3 años tuvo una reacción y le empezaron a salir ronchas en la piel. En ese entonces, un especialista de cabecera le inyectó cortisona y aunque la afección se le calmó por el momento, su aparición ha sido constante desde esa fecha hasta la actualidad.
Isa recuerda que el primer alergólogo no le hizo ninguna prueba de alergias a su bebé y solo le dio un antihistamínico de toma diaria, pero que en el fondo, eso la inquietaba como madre, pues sospechaba que si se lo daba todos los días, iba a existir una reacción.
“Pedimos una segunda opinión y solamente nos dijeron que era alérgica al polvo, al polen y a los ácaros”, menciona la mamá de Luz para SuMédico. Pero el problema iba más allá…
El 8 de julio se conmemora el Día Mundial de las alergias y esto es lo que debes saber.
Foto: proporcionada por Isa Tamayo
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¿Qué son las alergias?
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos define las alergias como una reacción de nuestro sistema inmunitario hacia algo que no molesta a la mayoría de los demás. Quienes tienen alergias suelen ser sensibles a más de una cosa y sus síntomas pueden ser: asma, goteos nasales, estornudos, sarpullidos, picazón, hinchazón (edema), además de que pueden ir de leves a severas. También hay alergias a alimentos y a medicamentos.
“La contaminación eleva la prevalencia de asma y las alergias”
El doctor y especialista en inmunología clínica y alergia, Francisco Javier Espinosa Rosales, explica a SuMédico que la calidad del aire que respiramos tiene mucho que ver con el desarrollo de las alergias y que el componente hereditario también influye.
"Una persona que vive en la ciudad tiene más riesgo de desarrollar alergia que aquella que vive en el campo, pues se encuentra expuesta a la contaminación. Además, nuestro estilo de vida también influye: una persona que tiene sobrepeso y que es sedentaria tiene más riesgo de desarrollar alergias en comparación con un individuo que se cuida y hace ejercicio regularmente”, indica Espinosa Rosales.
Sobre el componente hereditario, el experto advierte que si uno de los padres es alérgico, el riesgo de la persona es de alrededor de un 40%. Si los dos son alérgicos, dicho riesgo de tener alergias aumenta hasta casi el 80%. Pero aunque el individuo no tenga antecedentes familiares de alergia, tiene un riesgo de 20% de desarrollar alergias en su vida.
En el caso de Luz Gabriela, su madre no tiene alergias pero su papá, su tío y su abuela materna sí. A pesar de ello, la afección preocupó a su mamá pues Luz es una bebé sana y no es enfermiza.
“Mi primera reacción como madre fue de preocupación porque mi hija no es enfermiza, se podría decir que era su primera enfermedad. Ella tenía 2 años, 4 meses. Estábamos preocupados porque desconocíamos el mundo de las alergias”, relata Isa.
De acuerdo con fuentes del sector, en México hay 1,200 alergólogos certificados y se requieren 1 por cada 100 mil habitantes
Foto: proporcionada por Isa Tamayo
Las alergias en México
Espinosa Rosales explica que las alergias más comunes en México son 4:
1) Rinitis Alérgica: la más común. Se estima que afecta de un 20 a 30% de los mexicanos. El doctor comenta que hay lugares en donde llega a ser de hasta el 40% como Mexicali, Mérida y la Ciudad de México
2) Asma: afecta a un aproximado de entre el 10% y el 15% de los mexicanos dependiendo del lugar donde se viva, aunque en palabras del experto, la contaminación eleva la prevalencia del asma.
3) Dermatitis atópica: se da más en los niños pequeños, en las primeras semanas o meses de vida
4) Alergia alimentaria: afecta aproximadamente a entre 5 y 6% de la población general del país.
Foto: proporcionada por Isa Tamayo
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“Algún día que no esté, ella va a comer algo y se va a morir”
Las alergias de Luz Gabriela iban más allá de solo el polen o los ácaros y en palabras de su madre, después de las dos primeras opiniones, buscaron una tercera, que resultó ser más completa.
“Hace una semana consultamos a otro especialista y fueron más pruebas en sus dos brazos. Salió alérgica a los ácaros, hongos, al hielo… no sabíamos que era alérgica al hielo (a bebidas frías), saborizantes, colores artificiales (azul y amarillo 5 y 6), a sorbato sódico y de potasio y a todos los alimentos tanto procesados como embotellados, enlatados, embutidos, alimentos chatarra”.
En palabras de Isa, las alergias de su pequeña cambiaron toda la rutina de la familia, pues a veces ella se quiere comer un dulce, alguna galleta y se le tiene que restringir cualquier tipo de comida empaquetada y enlatada en casa.
La salud de los hijos es algo que preocupa mucho a las mamás y papás. En el caso de Isa, ella relata que su principal preocupación como madre fue que algún día que ella no estuviera, su hija comiera algo no recomendado.
“Mi primer pensamiento fue: “algún día que no esté, ella va a comer algo y se me va a morir”, confiesa para SuMédico
¿Cómo se tratan las alergias?
Actualmente no existe cura para las alergias, explica el doctor Rosales, pero cuando una persona con alergia cutánea, nasal o respiratoria se identifica como alérgica y junto con su alergólogo de cabecera identifica la severidad de la afección, se determina alguno de los siguientes pasos:
1: Prevención del contacto con la sustancia que causa la alergia:
“Si la persona es alérgica a los ácaros del polvo, evitar el polvo dentro de casa. Forrar la cama y las almohadas con fundas especiales, establecer medidas estrictas de control en el ambiente. Si el afectado es alérgico al polen, cerrar ventanas cuando se esté en casa para evitar que el polen que se encuentra suspendido en el aire entre en contacto. Dichas medidas son las que los inmunólogos alergólogos denominamos ''de control ambiental''", explica Rosales.
2) Tratamiento prolongado con medicamentos que quiten la inflamación del tejido afectado
En el caso de la nariz a nivel nasal, del asma a nivel inhalado, en la piel directo tópico sobre la piel. "Habitualmente los medicamentos antinflamatorios son del grupo de los corticosteroides. Los medicamentos con los que contamos actualmente son muy seguros y se pueden usar por meses o años a dosis bajas o moderadas sin riesgo para las personas. Dejamos los esteroides orales para casos extremadamente graves y por tiempos muy cortos", detalla el experto.
3) Inmunoterapia o vacunas de alergia:
"Lo que hace es dar dosis crecientes de la sustancia a la que es alérgica el individuo, alérgenos estandarizados.Van aumentando poco a poco la cantidad a la que está expuesta la persona con el objetivo de inducir una tolerancia de su sistema inmune. Reeducamos a su sistema. Eso a la larga cuando se utiliza con las dosis adecuadas por personas certificadas, induce una curación y un control permanente", apunta Rosales.
Actualmente la pequeña Luz Gabriela está siendo tratada con vacunas, inmunoterapias y un antihistamínico que debe tomar por 4 meses.
Foto: proporcionada por Isa Tamayo
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¿Cómo diferenciar las alergias del covid?
La diferencia entre el covid-19 y las alergias, explica el doctor Rosales, es que habitualmente el coronavirus afecta el estado general de la persona, quien presenta dolores de musculares y de articulación, malestar general, dolor de cabeza y la gran mayoría, algo de fiebre.
“En el caso de las personas alérgicas, se recomienda que mantengan su tratamiento y su cuidado por el especialista certificado para mantener desinflamada sus vías respiratorias: bronquios en el caso de asma o nariz en el caso de rinitis para evitar que, en caso de un contagio de coronavirus, desarrollen complicaciones”, concluye Rosales.