Para nadie es un secreto que las jeringas producen tanto miedo como alivio. No son amigables para muchos, pero sí engendran cierta sensación de tranquilidad cuando la enfermera saca la aguja del cuerpo y sabemos que el medicamento ha ingresado y que nos proporcionará un bienestar.
Usar una jeringa conlleva una responsabilidad muy importante, ya que de ella dependen muchas cosas: primero que el tratamiento se lleve de manera adecuada y, segundo, que su utilización no genere daños colaterales en el organismo del paciente.
Para ello, la jeringa debe cumplir con ciertos estándares de calidad que garanticen su buena utilización y excelentes resultados.
¿Cuáles pueden ser los daños colaterales?
- Un moretón doloroso
- La ruptura de vasos sanguíneos
- Dolor al tener que inyectar varias veces, apuñalando la piel, si es que la jeringa se ocluye.
¿Por qué se dan estos problemas?
Generalmente, este tipo de daños surgen cuando la jeringa que se utiliza viene defectuosa de fábrica.
Las características que las personas y el personal médico debemos revisar cuando adquirimos o vamos a utilizar una jeringa son las siguientes:
- La jeringa no debe contener rebabas en el pivote, ya que pueden desprenderse al momento de la inyección e, incluso, ingresar al torrente sanguíneo o al músculo del paciente, provocando problemas serios.
- La aguja debe embonar perfectamente, ya que se corre el riesgo de que se tape o tenga fugas, o que salga disparada por la presión, provocando mucho daño.
- Claridad en los números.
- Soportes adecuados para tener un mejor agarre.
- Tapón con buena lubricación para un buen deslizamiento.
- Anillos para dosis correctas y evitar que el líquido se salga por accidente.
La licenciada en enfermería, Xochitl Benítez, especialista en el uso de jeringas, comenta al respecto: “Cada elemento de la jeringa es de suma importancia para el correcto manejo de la salud del paciente y suministro o extracción de la sustancia o medicamento”.
Igualmente, hizo hincapié en que, siendo la salud un derecho estipulado en la Constitución Política del país, “no deben existir clases sociales cuando se trata de salud, todos debemos tener acceso a instrumentos médicos de primera calidad.”