México es el país con primer lugar en obesidad infantil, por lo que médicos y especialistas del Hospital Infantil de México “Federico Gómez” (HIMFG), a través de su Clínica de Obesidad, crearon la app PAIDOS, para ayudar a niños con obesidad a mejorar su condición física y psicológica.
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De acuerdo a Salvador Villalpando Carrión, jefe del Departamento de Gastroenterología y Nutrición, se hicieron pruebas de la eficacia de la app en 400 niños con obesidad durante seis semanas.
La idea es aprovechar los avances tecnológicos, especialmente los avances multimedia para tratar a los niños con obesidad.
Los resultados de la prueba, mostraron que la app fue eficaz para ayudar a 90% de los participantes a reducir peso e índice de masa corporal (IMC).
Uno de los niños participantes, inició el tratamiento pesando 70.9 kilogramos y al final, perdió 2.3 kilogramos y tres centímetros de cintura.
Otro de los menores, disminuyó significativamente su IMC, mientras que otro pequeño más, perdió más de dos kilos de peso.
Santiago, un niño de 12 años de edad que participó en las pruebas, logró bajar 10 kilos gracias a los talleres de nutrición, manejo de emociones y rutinas de ejercicio a los que tuvo acceso gracias a la app PAIDOS.
Teresa Silenceo, jefa adjunta de la Clínica de Obesidad del HIMFG, afirma que los buenos resultados se dieron gracias a la comunicación de los niños y padres de familia con los médicos especialistas de distintas disciplinas a través de la app.
PAIDOS hace que tanto los niños como sus familiares puedan reportar la cantidad y tipo de alimentos que consumen a lo largo del día y permite distinguir si el hambre es física o emocional.
“Cuando es consecuencia de una situación emocional, el paciente siente hambre que se acompaña de emociones como ansiedad o enojo. La aplicación ofrece herramientas para frenar esas conductas, entre ellas, ejercicios físicos y la no interrupción de hábitos de alimentación saludable”, añade María José Adame, psicóloga de la clínica.
Además, la aplicación mejora los resultados en menor tiempo y facilita la interacción médico-paciente.
“Sin necesidad de acudir de manera frecuente a la institución, lo cual compromete y motiva aún más al paciente a mantenerse en tratamiento. Sin embargo, mantienen un monitoreo médico presencial cada tres meses, dependiendo del caso”, explica Villalpando.
Por su parte, Jorge Eduardo Vargas González, responsable de la Actividad Física y el Deporte de la clínica, señala que la activación física se realiza en tres etapas.
Inicia con 20 minutos tres veces por semana y culmina con 300 minutos a la semana y permite a los niños ver tutoriales sobre la forma correcta de hacer flexiones según su condición física, fuerza y flexibilidad.
El programa piloto de la app se puso en marcha en los cursos de la Clínica de Obesidad, donde se hacen monitoreos y control de niños con problemas de sobrepeso y obesidad.
¿Qué opinas? ¿Te gusta esta estrategia?
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App para niños con obesidad
De acuerdo a Salvador Villalpando Carrión, jefe del Departamento de Gastroenterología y Nutrición, se hicieron pruebas de la eficacia de la app en 400 niños con obesidad durante seis semanas.
La idea es aprovechar los avances tecnológicos, especialmente los avances multimedia para tratar a los niños con obesidad.
Los resultados de la prueba, mostraron que la app fue eficaz para ayudar a 90% de los participantes a reducir peso e índice de masa corporal (IMC).
Uno de los niños participantes, inició el tratamiento pesando 70.9 kilogramos y al final, perdió 2.3 kilogramos y tres centímetros de cintura.
Otro de los menores, disminuyó significativamente su IMC, mientras que otro pequeño más, perdió más de dos kilos de peso.
Santiago, un niño de 12 años de edad que participó en las pruebas, logró bajar 10 kilos gracias a los talleres de nutrición, manejo de emociones y rutinas de ejercicio a los que tuvo acceso gracias a la app PAIDOS.
Estrategia multidisciplinaria
Teresa Silenceo, jefa adjunta de la Clínica de Obesidad del HIMFG, afirma que los buenos resultados se dieron gracias a la comunicación de los niños y padres de familia con los médicos especialistas de distintas disciplinas a través de la app.
PAIDOS hace que tanto los niños como sus familiares puedan reportar la cantidad y tipo de alimentos que consumen a lo largo del día y permite distinguir si el hambre es física o emocional.
“Cuando es consecuencia de una situación emocional, el paciente siente hambre que se acompaña de emociones como ansiedad o enojo. La aplicación ofrece herramientas para frenar esas conductas, entre ellas, ejercicios físicos y la no interrupción de hábitos de alimentación saludable”, añade María José Adame, psicóloga de la clínica.
Además, la aplicación mejora los resultados en menor tiempo y facilita la interacción médico-paciente.
“Sin necesidad de acudir de manera frecuente a la institución, lo cual compromete y motiva aún más al paciente a mantenerse en tratamiento. Sin embargo, mantienen un monitoreo médico presencial cada tres meses, dependiendo del caso”, explica Villalpando.
Por su parte, Jorge Eduardo Vargas González, responsable de la Actividad Física y el Deporte de la clínica, señala que la activación física se realiza en tres etapas.
Inicia con 20 minutos tres veces por semana y culmina con 300 minutos a la semana y permite a los niños ver tutoriales sobre la forma correcta de hacer flexiones según su condición física, fuerza y flexibilidad.
El programa piloto de la app se puso en marcha en los cursos de la Clínica de Obesidad, donde se hacen monitoreos y control de niños con problemas de sobrepeso y obesidad.
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