Main logo

En calor, medicina pueden perder eficacia

Pastillas e insulina pueden perder sus propiedades curativas si son expuestas a una temperatura muy elevada; la mayoría de los pacientes no lo sabe.

Escrito en ESPECIALIDADES el

Las vacaciones de verano traen algo más que momentos de esparcimiento, para las personas que tienen diabetes, supone un mejor cuidado de su persona, no sólo en la alimentación y en la procuración del ejercicio diario, sino también en el cuidado a no desarrollar enfermedades relacionadas con el calor.

Si, la diabetes aumenta las posibilidades de desarrollar males que tienen que ver con las altas temperaturas y muchos de los pacientes no saben como reducir esos riesgos, según revela una encuesta que realizó la Clínica Mayo.

"Las personas diabéticas tienen menos capacidad de sudar, lo que las predispone a enfermedades relacionadas con el calor, al igual que las hiperglucemias no controladas", advirtió en un comunicado de prensa distribuido por la Endocrine Society la investigadora líder, la Dra. Adrienne Nassar, residente médica de tercer año de la Mayo.

Los pacientes encuestados, señalan, tenían un control glucémico inferior al óptimo durante el verano, lo que también puede aumentar su riesgo de deshidratación.

Nassar y otros investigadores analizaron 152 encuestas sobre el conocimiento del calor, completadas por pacientes diabéticos en una clínica de Phoenix. Las encuestas indicaban que veinte por ciento de los pacientes no tomaban precauciones hasta que las temperaturas superaban los 38 °C (100 °F), a pesar de que cuando se toma en cuenta la humedad, las enfermedades por calor pueden ocurrir con temperaturas de hasta 27 °C (80 °F).

Los autores señalaron que más diabéticos visitan las salas de emergencia cuando hace calor, y que hay un aumento en las hospitalizaciones, y hasta en las muertes.

A pesar de este hecho, apenas alrededor de la mitad de los pacientes sabían la definición de "índice de calor", una combinación de los niveles de temperatura y humedad. El calor es más peligroso con una humedad alta, apuntaron los investigadores, porque la humedad tiende a reducir la sudoración y evitar que el organismo se enfríe de forma natural.

Medicamentos que pierden eficacia

Los medicamentos y suministros para la diabetes también pueden dañarse con el calor, apuntó Nassar, quien enfatizó que "los medicamentos orales y la insulina tienen un rango terapéutico de temperatura, por encima del cual pierden eficacia".

Pero aunque casi las tres cuartas partes de los pacientes reconocieron que les habían advertido sobre el calor y la insulina, muchos menos se daban cuenta de que el calor representaba un riesgo para sus medicamentos orales contra la diabetes (39 por ciento), medidores de glucosa (41 por ciento), y tiras reactivas de glucosa (38 por ciento).

Irónicamente, 37 por ciento de los que se daban cuenta del riesgo elegían manejarlo dejando de llevar consigo sus suministros médicos cuando salían al calor, creando así un nuevo riesgo.

"Si las personas no pueden revisar sus glucemias mientras no están en casa, no es seguro", apuntó Nassar, y añadió que se necesita más educación sobre el tema para los pacientes.

La encuesta, llevada a cabo en colaboración con la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica y el Servicio Nacional de Meterología, fue presentada en la reunión anual de la Endocrine Society, en San Diego.