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Comer azúcar antes de los 6 meses aumenta riesgo de obesidad

El consumo de alimentos sólidos se sugiere posterior a los seis meses de edad.

Escrito en ESPECIALIDADES el

De acuerdo con la Secretaría de Salud (Ssa), el consumo de azúcar añadido antes de los seis meses de edad aumenta el riesgo de sobrepeso y obesidad.





Al respecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomienda reducir el consumo de azúcar libre por ejemplo los azúcares añadidos y aquellos presentes naturalmente en jarabes, miel o en jugos de frutas.





Los azúcares añadidos pueden ser refinados o sin refinar y son añadidos por los fabricantes y cocineros.





La OMS sugiere que tanto los adultos como los niños, reduzcan su consumo de azúcar libre a menos del 10% de la ingesta calórica total y una reducción a menos del 5% de la ingesta calórica total generaría beneficios adicionales para la salud.





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Azúcar añadido antes de los 6 meses de edad aumenta riesgo de obesidad





La Ssa también advierte que el 26% de los infantes pasa de la lactancia materna exclusiva al consumo de alimentos sólidos antes del medio año de vida.





Lo anterior significa que en México, la cuarta parte de los padres anticipa la alimentación complementaria que debe recibir un menor después de los 6 meses de edad, lo que, de acuerdo con la Ssa incrementa la mortalidad por enfermedades crónico degenerativas al llegar a la edad adulta.





Al respecto, la doctora Jennifer Mier Cabrera, médico adscrito al Departamento de Nutrición y Bioprogramación del Instituto Nacional de Perinatología (INPer), explica que la OMS recomienda que el consumo de alimentos sólidos sea posterior a los seis meses de edad.







Mier también precisó que conforme los resultados del estudio cohorte “OBESO- Origen bioquímico y epigenético de la obesidad”, realizado por el INPer, a una población de 92 niños, el 50% de ellos comenzó el consumo de azúcares antes de los seis meses de edad, lo que aumenta el riesgo de desarrollar malnutrición y obesidad cuando se llega a la adultez.



La investigadora también sugiere que el consumo de azúcares añadidos sea por lo menos después de los dos primeros años de vida para ASÍ reducir la posibilidad de sobrepeso y de grasa abdominal.



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