Bañarse con agua caliente es uno de los grandes placeres de la vida para algunas personas, y adquirir dicha actividad como un hábito puede resultar benéfico para la salud del corazón, indica un estudio publicado en la revista Heart.
La investigación señala que tomar baños calientes disminuye el riesgo de morir por enfermedad cardiovascular o por accidente cerebrovascular, y este beneficio aumenta entre más baños semanales se tomen.
Para dicha conclusión se hizo un análisis observacional que incluyó los datos de más de 61 mil personas en Japón, los cuales reportaron sus hábitos de baños, y se relacionaron con su estilo de vida, lo que incluyó alimentación, ejercicio e ingesta de alcohol.
Se estudió a los participantes de acuerdo con sus hábitos al bañarse, dividiéndolos en tres grupos según la frecuencia de baño: ninguna a dos veces por semana, tres a cuatro veces por semana, y casi siempre o diaramente.
Además se les dividió dependiendo de la temperatura que suelen utilizar al bañarse, la cual podía ser tibia, cálida o caliente.
El estudio llegó a la conclusión que tomar un baño diario reduce en un 28% el riesgo de enfermedad cardiovascular y un 26% menor riesgo de accidente cerebrovascular, en comparación con las personas que tomaban dos o menos baños a la semana.
La investigación también indicó que la temperatura del agua influía en el riesgo de dichos padecimientos, pues el agua tibia muestra 26% menor riesgo de enfermedad cardiovascular, mientras que con el agua caliente el riesgo es 35% menor.
"Descubrimos que el baño frecuente en la bañera se asoció significativamente con un menor riesgo de hipertensión, lo que sugiere que un efecto beneficioso del baño en la bañera sobre el riesgo de enfermedad cardiovascular puede deberse en parte a un menor riesgo de desarrollar hipertensión"
Otros beneficios del agua caliente…
Otra investigación publicada en el Journal of Applied Physiology indica que la inmersión en agua puede ayudar a reducir la inflamación y a mejorar el metabolismo, sobre todo para las personas que no realizan ejercicio físico.
Dicho estudio indica que meterse en una bañera con agua caliente puede ayudar a disminuir la inflamación en hombres sedentarios y con sobrepeso, ya que la temperatura alta del agua aumenta la respuesta inflamatoria aguda y libera sustancias que fungen como antiinflamatorios en el cuerpo.
Además, este estudio también mostró que el agua caliente puede ayudar a bajar los niveles de azúcar en la sangre, benéfico para la prevención de enfermedades como la diabetes, pues incluso mejora la sensibilidad a la insulina.
"Mejorar aspectos del perfil inflamatorio y aumentar el metabolismo de la glucosa en varones sedentarios y con sobrepeso y podría tener implicaciones para mejorar la salud metabólica en poblaciones que no pueden cumplir con el actual recomendaciones de actividad física ”