Las enfermedades cardiovasculares son más frecuentes entre los adultos mayores, por lo que es vital llevar un estilo de vida saludable para evitar el desarrollo de cardiopatías en la tercera edad.
Este tipo de padecimientos son la principal causa de muerte en el mundo, y están fuertemente ligados a la presencia de factores de riesgo, como llevar una vida sedentaria, obesidad y sobrepeso, tabaquismo, y antecedentes familiares.
La edad se convierte en un factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades a partir de los 55 años en hombres, y de los 60 años en mujeres. De acuerdo con la Fundación Española del Corazón, algunos consejos para cuidar la salud cardíaca en los adultos mayores son:
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1. Controlar los niveles de presión arterial
En los adultos mayores es importante que un especialista revise de forma frecuente sus niveles de presión arterial, sin embargo, para un seguimiento diario, éste control de la presión en las arterias puede hacerse desde casa.
Al medir la presión arterial es esencial prestar atención en el pulso, si éste es irregular es recomendable consultar con un médico para descartar arritmias benignas frecuentes en los pacientes mayores.
Así mismo, si los latidos por minuto son menores a 50, o si la cifra de presión arterial es superior a 140/90 mm HG, es necesario acudir a un centro de salud para que haga una revisión y descarte el riesgo de complicaciones.
2. Estilo de vida cardiosaludable
Los adultos mayores deben llevar buenos hábitos diarios para evitar o retrasar la aparición de problemas cardiovasculares. Esto debe incluir la adopción de una dieta mediterránea baja en sal, que incluya el consumo frecuente de pescado, fruta, verdura y aceite de oliva.
De igual forma, las personas en la tercera edad deben realizar actividad física de tres a cinco veces a la semana. El ejercicio debe ser aeróbico y moderado, y debe sumar al menos 150 minutos de ejercicio físico semanales.
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3. Realizar análisis generales de salud
Realizar al menos un chequeo de salud general al menos una vez al año ayudará a reconocer cambios en el estado de la salud de los adultos mayores, para identificar posibles afecciones cardíacas de manera oportuna.
Este análisis general debe incluir parámetros de función renal, lípidos (colesterol y triglicéridos), glucemia y hemoglobina glicolisis para despistaje de diabetes.
4. Evitar factores de riesgo
Existen factores de riesgo que pueden aumentar el riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular en los adultos mayores, estos son principalmente la obesidad, el alcoholismo y el tabaquismo.
Es necesario que después de los 55 años, los adultos refuercen su compromiso para evitar el hábito del consumo de tabaco y las bebidas alcohólicas, pues aumentan la probabilidad de desarrollar una afección cardíaca. De igual forma una buena alimentación y actividad física pueden reducir la presencia de obesidad y sobrepeso entre las personas de la tercera edad.