Main logo

Autista o con autismo: ¿Cómo se dice?

"La gente debería escuchar a quien vive esa discapacidad y respetar cómo se nombran, nadie debe imponer la manera de decirnos", dice Jazmín, quien vive con TEA

Escrito en MENTE SANA el

En general se dice “personas con discapacidad”, no “discapacitado” y durante algunos años, diversos activistas por la concienciación acerca del Trastorno del Espectro Autista (TEA) han hecho hincapié en que a las personas con TEA se les diga “personas con autismo” y no “autistas”.

No obstante, la postura no ha sido del todo aceptada por algunos miembros de la comunidad, quienes mencionan que decir “autistas” es adecuado y referirse a estos individuos como “persona con autismo” es incorrecto.

Esta decisión sobre la expresión ha sido justamente, no englobar la identidad de una persona sólo en la discapacidad ni reducir a alguien a una condición ni etiquetarla.

¿Se dice “autista” o “persona con autismo”?

“Nosotros como autistas no podemos separar nuestro autismo de nuestra personalidad. Es parte de nosotros, el autismo no es un accesorio que me puedo quitar, es parte de mí”, menciona Jazmín González Cruz, autodenominada autista, madre de un adolescente autista miembro del colectivo Ceabrillante y del movimiento de la neurodiversidad (“neurodiversidad” es un término acuñado en 1990 por una persona autista y de ahí surgieron el paradigma del movimiento de la neurodiversidad y la neurodiversidad, explica).

Ceabrillante tampoco está de acuerdo con el uso del azul y del rompecabezas como símbolo de la condición. Según Jazmín se trata de “un discurso de odio, donde se ha visto al autismo como algo malo que curar. La relación que impuso esos símbolos sigue buscando una cura para el autismo. Los dos fueron generados e impuestos por Autism Speaks.”  

Autism Speaks es una asociación creada en el 2005 en Estados Unidos y en su portal puede leerse “Autism Speaks está dedicada la búsqueda avanzada de causas y mejores tratamientos para el TEA y condiciones relacionadas, por medio del financiamiento y la colaboración”.

“Las asociaciones de padres todo lo han hecho sin nosotros. Por eso hicimos nuestro propio movimiento, nuestros propios colores y símbolos. El infinito es símbolo del movimiento de la neurodiversidad. Para el autismo podemos usar el infinito dorado o rojo.

Si alguien no autista (denominado “alista”) se refiere a nosotros como ‘personas con autismo’, yo puedo decirle ‘soy autista’ y explicarle por qué a mí me parece mejor, y esa persona debería de escuchar a quien vive esa discapacidad y respetar como me nombro, nadie debe imponer como nombramos. Cada persona que vive la discapacidad debe ser escuchada y respetada, imponer la manera de nombrarme es capacitismo”, indica Jazmín.

Parte de la comunidad todavía acepta el color azul para representar el autismo y la pieza del rompecabezas, debido a que el primero es el color del mar, a veces agitado y a veces en calma, y el segundo por la complejidad y diversidad que representa la condición. “Esto también es porque las personas con autismo necesitan encontrar su sitio adecuado en la sociedad para encajar y ser aceptados”, se puede leer en el portal YoTambién.

El fundador de Iluminemos por el Autismo (antes Iluminemos de Azul), cuenta al respecto, Gerardo Gayá, menciona: “Se trata de un debate que traemos desde hace casi un año. Es gracioso por los contextos sociales culturales. En México nos matamos por un tiempo para que fuera ‘persona con discapacidad’ y ahora las personas con autismo prefieren que les digamos ‘autistas’. Viene un cambio de mentalidad y de narrativa interesante. Estamos empezando a ver que algunas personas se sienten mucho más cómodas, para bien, para mal, cada quien, pero han adoptado su propio diagnóstico como identidad, en donde no son personas con autismo, sino autistas.

“Al final yo digo ¿con qué te sientes cómodo? darles el gusto a todos está muy difícil, porque para muchos todavía es ofensivo en algunos contextos. Por ejemplo, en Perú una asociación se llama ‘Soy autista ¿y qué? yo creo que aquí en México a una asociación de ese nombre le caen a palos. Entonces, es complejo”, dice Gayá.

Iluminemos por el Autismo también menciona en su web que, aunque el azul y el rompecabezas funcionaron como símbolos reconocidos a nivel mundial para abrir conversaciones, entiende que el autismo es una condición de vida que “ha vivido una evolución en su conceptualización, en su comprensión, conocimiento y en lo que respecta a la concientización de la sociedad”.

“Con el contexto social y la subjetividad individual derivada de la evolución han surgido nuevos símbolos, colores y conceptos. Aunque falta mucho por hacer, es evidente que el cambio en todo lo relacionado al Espectro Autista, la diversidad e inclusión es y será constante”, se puede leer en YoTambién.

(Con información de YoTambién)