El páncreas es un órgano ubicado en la parte superior del abdomen y cuando se desarrolla un tumor en cualquier parte de este, se le llama cáncer de páncreas.
De acuerdo con el World Cancer Research Fund, el cáncer de páncreas es el duodécimo tipo de cáncer más común en los hombres y el undécimo en las mujeres.
El National Health Service de Reino Unido (NHS) apunta que la gravedad del cáncer de páncreas depende del lugar en el que se encuentre, de su tamaño, si se ha diseminado y el estado de salud en general de la persona que lo padece.
Ahora, un estudio publicado en el journal Cancer Discovery el pasado 30 de octubre descubrió que el cerebro jugaría una parte importante en el desarrollo del cáncer de páncreas.
Si se trata de un tumor (o varios) que se encuentra cerca del abdomen… ¿Tiene alguna relación el cerebro con su crecimiento?
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Proteína cerebral jugaría un papel importante en el cáncer de páncreas
La American Cancer Society (ACS) indica que el cáncer de páncreas en sus etapas tempranas no causa signos ni síntomas y que estos se manifiestan cuando la enfermedad ya está avanzada. Sin embargo, hay señales que, en caso de presentarse, deberían ser una indicación para que las personas acudan al médico.
Estas señales, aclara la ACS, no significa que los individuos tengan cáncer de páncreas porque pueden aparecer en otras afecciones, pero no se les debe dar por sentado:
- Coloración amarilla en ojos y piel
- Heces color claro o grasosas
- Picazón en la piel
- Dolor de espalda o vientre
- Pérdida de peso y falta de apetito
- Agrandamiento del hígado o la vesícula biliar
- Vómitos o náuseas
- Coágulos de sangre
- Diabetes
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El estudio publicado en el journal Cancer Discovery menciona que una proteína que se creía que solo participaba en el desarrollo de neuronas cerebrales también juega un papel importante en el crecimiento del cáncer de páncreas.
Dicha proteína llamada Netrin G1 le da nutrientes a las células cancerosas y las protege del sistema inmune.
“Identificamos a la proteína Netrin G1 (NetG1) como un promotor de la tumorigénesis (inicio /generación) de tumores en el cáncer de páncreas y descubrimos que los fibroblastos asociados a este tipo de cáncer de Netrin G1 ayudan a la supervivencia del adenocarcinoma ductal de páncreas, a través de un efecto mediado por NetG1 sobre el metabolismo”, se puede leer en el estudio original.
El National Cancer Institute define un adenocarcinoma como el cáncer que comienza en las glándulas secretoras, las cuales se encuentran en el tejido que recubre ciertos órganos y libera sustancias en el cuerpo, como mocos o jugos digestivos, entre otros.
La proteína Netrin G1 favorecería el desarrollo del cáncer de páncreas, aunque los especialistas señalan que falta más investigación al respecto.