La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha alertado que debido a la pandemia de covid-19, enfermedad causada por el nuevo coronavirus, uno de cada diez trabajadores de la salud experimenta pensamientos suicidas y uno de cada cinco padece depresión.
Lo anterior se agrava pues más de 75% sufre estrés ante el temor de contagiarse de coronavirus y la mayoría muestran preocupación ante la posibilidad de infectar a sus seres queridos.
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Uno de cada 10 trabajadores de la salud en América sufre pensamientos suicidas y uno de cada 10 padece depresión
Fue durante conferencia de prensa virtual que Jarbas Barbosa subdirector de la OPS, puso como ejemplo el caso de Chile, sin embargo, aclaró que estas cifras forman parte de los resultados preliminares del estudio “Héroes” que se realiza en seis países de la región:
“Los trabajadores de la salud se han visto especialmente afectados por covid-19, más que cualquier otro grupo de trabajadores. Están haciendo sacrificios personales extraordinarios con decisiones difíciles y están allí en las trincheras trabajando durante meses”.
Conforme datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la depresión es una enfermedad frecuente en todo el mundo y es la principal causa de discapacidad que contribuye de forma importante a la carga mundial general de morbilidad:
“La depresión es distinta de las variaciones habituales del estado de ánimo y de las respuestas emocionales breves a los problemas de la vida cotidiana”.
Falta de servicios de salud mental y estrés colectivo, en aumento
Además de lo anterior, Barbosa dijo que la emergencia sanitaria también ha incrementado el nivel de estrés colectivo y mientras más tiempo dure la pandemia, mayores serán los impactos en la salud mental.
Por otro lado, también hizo referencia a los datos de una reciente encuesta realizada por la OPS y la OMS la cual revela que, debido a la falta de recursos, la mayoría de los países no está brindando servicios de salud mental y tampoco cuentan con el personal para la atención de esta problemática en momentos como este, en los que más se necesitan.
Barbosa llamó a que los gobiernos destinen recursos para brindar servicios de salud mental de forma inmediata y reiteró que los grupos más vulnerables son:
- Adultos mayores
- Personas con discapacidad
- Personas con enfermedades preexistentes
- Migrantes
- Grupos étnicos minoritarios.
Muertes de trabajadores de la salud, preocupación en México
Fue durante el mes de septiembre de 2020 que un reporte de Amnistía Internacional advertía la muerte de 1,320 trabajadores de la salud, la cifra más alta conocida para un solo país:
“A nivel mundial han muerto al menos 7 mil trabajadores de la salud, de este total un 18.8% de los fallecimientos han ocurrido en México”.
Al respecto, Steve Cockburn, director de Justicia Económica y Social de Amnistía Internacional dijo:
“El hecho de que más de 7 mil personas mueran mientras intentan salvar a otras es una crisis de una escala asombrosa. Todas las personas trabajadoras de la salud tienen derecho a estar seguras en el trabajo, es un escándalo que tantos estén pagando el precio final”.
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Finalmente, Jarbas Barbosa alertó:
“La pandemia ha aumentado el nivel de estrés colectivo en la región de las Américas, causando ansiedad y depresión. Mientras más tiempo continúe la crisis, mayor será el impacto y estos efectos van a seguir presentes, tiempo después de que se logre el control de la pandemia”.