Subir el cerro del Tepozteco, visitar la iglesia, caminar por el tianguis los jueves o domingos y visitar las tiendas de artesanías, no es lo único que se puede hacer en Tepoztlán, Morelos. Ubicado a una hora del Distrito Federal, el destino turístico ya se convirtió también en una excelente opción para ir a relajarse con la variedad de masajes que se ofrecen.
Recibir un masaje, no es sólo una tendencia que te incluye dentro de aquellos que les gusta cultivar su cuerpo, que buscan un equilibrio mental o simplemente escapar del estrés, un buen masaje, dice Dora María Zúñiga García también es benéfico para la salud.
“Si yo pudiera, me daría uno diario, porque te abre los canales energéticos, te activa la circulación y eso es salud para tu cuerpo, somos mitad energía, si la energía anda mal hay que canalizarla para que nuestro cuerpo responda bien”, dice la especialista quien tiene 10 años de experiencia.
Un masaje, señala Dora María, te ayuda a desestresarte, a aflojar los músculos que acumulan las tensiones diarias, “es un apapacho al cuerpo, que se cansa de tanta actividad y problema”.
Dora sabe que los compromisos cotidianos y también la economía, impiden a las personas tomar un masaje al día, por eso recomienda dejarse consentir al menos una vez al mes.
“La gente se olvida del cuerpo, a veces somos codos gastamos en otras cosas y no en un buen masaje. Ahorita en Tepoztlán, la gente viene a eso, son masajes… masajes.
Ella trabaja en la zona del estado de Morelos y tiene dos especialidades: el masaje sueco , que recomienda a los deportistas porque ayuda a aliviar las contracturas, “es relajante pero más fuerte, se trabaja con el pulgar para abrir el músculo” y el relajante, el que la gente pide más, tanto que ya se convirtió en tradicional.
Estado de ánimo al desnudo
Un masajista puede llegar a detectar tumores, en algunos casos, pero esa no es su labor; lo que si aprenden es a percibir los estados de ánimo de los clientes.
“Un masaje sirve para desbloquear músculos que están contracturados, para sentirse mejor físicamente; pero emocionalmente, también la gente saca todo, me han tocado personas que cuando les he dado masaje, se sueltan a llorar, tienen los sentimientos comprimidos, guardados, por eso es recomendable que se lo hagan”.
Un masaje a cualquier hora es bueno, no importa si es en la mañana o en la tarde, “la mayoría de la gente lo pide en la noche para dormir descansado, es recomendable en la tarde para relajarse tranquilamente y quedarse con ganas de descansar”.
No es exclusivo de mujeres
Hace algún tiempo, cuenta Dora María, la gente le empezó a tener miedo a los masajes, lo veían como una cosa rara, se distorsionó mucho, por los anuncios que salen en los periódicos, “ pero en Tepoztlán estamos con suerte de que la gente sabe que aquí damos masaje normal”, dice riendo.
Y aunque la clientela femenina sigue siendo mayoría, los hombres ya empiezan a pedir no sólo un masaje, sino las limpiezas faciales… “ya no les da vergüenza”.
“No es lo mismo darle un masaje a un hombre que a una mujer, ellos tienen más músculo, nosotras tenemos más grasa, es la constitución normal de los cuerpos”.
Masajista por vocación
Dora María Zúñiga fue instructora de aerobics 15 años, “los últimos años que di clase, cuando mis alumnas estaban en el piso relajadas, les daba masaje en manos y dedos, para darles un descanso completo. Siempre me ha gustado el masaje”.
Pero la técnica la aprendió de una amiga, María Teresa Álvarez, a quien conoce desde hace 27 años y quien es conocida como una de las primeras especialistas en el país.
Dora , quien está certificada en masaje sueco y relajante, también tomó varios cursos en la Universidad de Morelos, donde aprendió reflexología.
Ella se considera una masajista natural “las personas que dan masajes por ganar dinero, esas no sirven”, dice.
El costo promedio, de un masaje en Tepoztlán depende del lugar donde se tome, en un hotel cobran entre mil y 400 pesos, también ofrecen paquetes de 3 mil pesos.
Dora María hace masajes a domicilio con un costo de 300 pesos “voy a todos lados, menos al DF, por el traslado”.
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