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"Nunca sabré si mi ex esposo me infectó de hepatitis C"

Los tratamientos de última generación para hepatitis C muestran hasta 96% de efectividad, es decir 96 de cada 100 personas pueden curarse: Fon.

Escrito en VIDA SANA el

“Aunque pueda parecer algo viejo o que ya no pasa, me infectaron con hepatitis C, y hasta el momento no podría asegurar que fue la infidelidad de mi ex esposo o mis consultas en una clínica de maternidad en el Estado de México que me hacen pensar que lo barato sale caro”. María pide no revelar más que “lo necesario” de su historia pues asegura que cuando las personas saben que tiene la enfermedad, la rechazan.

Cada 28 de julio se celebra el Día Mundial contra la Hepatitis, cuyo tema seleccionado este 2020 por la Organización Mundial de la Salud (OMS), es: “Por un futuro sin hepatitis” con lo cual se busca concienciar sobre las hepatitis víricas, que inflaman el hígado y causan enfermedades como el cáncer de hígado. En ese sentido, en entrevista para SuMédico, el doctor Fernando Fon, Director Médico de la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF), A.C., explica que los tratamientos para la hepatitis han mostrado un gran avance que se traduce incluso en la cura de uno de los tipos más frecuentes de hepatitis, la hepatitis tipo C:

"Es muy importante conversar acerca del valor de la innovación, alertar a toda la población acerca de los riesgos que la hepatitis puede generar, por ejemplo, incrementar el riesgo de enfermedades tan letales como el cáncer. Hay que identificar algunos síntomas para buscar la consulta con profesionales de la salud; incluso en plataformas que podemos utilizar durante la pandemia para recibir atención e indicaciones médicas oportunas".

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María, una historia de hepatitis C en medio del divorcio

Las cifras actualizadas de hepatitis este 2020, presentadas por la OMS, muestran que 325 millones de personas en el mundo tienen hepatitis vírica B y C, además:

- 900 mil personas fallecen cada año por hepatitis B

- 10% de los casos de hepatitis B y el 19% de los de hepatitis C saben que están infectados

- 42% de los niños reciben la dosis de la vacuna contra la hepatitis B prevista al nacer

- La hepatitis tipo B y el tipo C son la mayor causa de muerte, con 1.4 millones de defunciones al año.

El doctor Fon explica que se estima que 3.4% de la población mexicana tiene hepatitis B y 2.5% de la población, tiene la infección por el virus de la hepatitis C y menciona que un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) muestra que sesenta de cada 100 mexicanos han tenido contacto con este virus.

Por otro lado, información publicada por EFE, indica que según estimaciones, cada año se presentan unos 7265 casos de hepatitis en México, de los cuales, 6268 mueren.

La historia de María comienza con sus intentos fallidos para lograr un embarazo. La mujer de 34 años recuerda cómo todo pasó muy rápido y que justo cuando pensaba que su “mala suerte” había terminado, se enteró de que tenía el virus de la hepatitis C del cual nunca supo nada hasta el momento en que le entregaron el diagnóstico.

María deseaba tener un hijo o una hija, vivía con su esposo luego de tres años de casados en los cuales nunca sospechó de infidelidad o mentiras, un día descubrió mensajes comprometedores de su esposo con otra mujer y algunos hombres:

“Mi familia pedía no divorciarme, son tradicionales, el divorcio era lo peor y yo tenía que quedarme con mi esposo toda la vida, aunque esto significara no ser la única, lo bueno que siempre he trabajado, pero no imaginé que enterarme de su infidelidad sería pedir el divorcio y despedirme de mi sueño de tener hijos. No fueron solamente mujeres, por eso siempre tengo la duda y la vergüenza”.

Como señala información de la OMS, el virus de la hepatitis C se transmite a través de la sangre y por las siguientes circunstancias:

- Consumo de drogas inyectables y por compartir el material de inyección

- Reutilización o esterilización inadecuada de material médico, sobre todo jeringas y agujas, en entornos sanitarios

- Transfusiones de sangre y productos sanguíneos sin analizar

- Prácticas sexuales que conllevan exposición a la sangre (por ejemplo, entre hombres que tienen relaciones homosexuales, en especial los que están infectados por el VIH o los que toman profilaxis contra esta infección antes de la exposición).

"No me fijé si era eran agujas o equipo nuevo"

María, motivada por el deseo de embarazarse acudió a consulta a una clínica de maternidad, la cual, después investigó, no tenía certificación para realizar estudios de laboratorio:

“Iba acompañada de un mejor amigo, había respondido el cuestionario, me hicieron un ultrasonido para detectar si tenía miomas, estudios para infecciones, análisis de sangre y todo iba bien hasta ahí, luego le avisarían a mi amigo que tardaría más en salir. Nunca me fijé si eran agujas o equipo nuevo, lo que ya quería era salir, a veces somos uno se confía”.

María nunca sospechó que su objetivo de ser madre se complicaría:

“Fui por mis resultados y cuando llegué a la clínica le pregunté a la enfermera pues qué había pasado que me llamaron para darme resultados antes de tiempo. La enfermera contestó que se había complicado porque me habían detectado hepatitis C y no era una buena idea embarazarme porque requería de un tratamiento y cuidados especiales para estar bien yo”.
 

Los tipos de hepatitis más graves

Existen cinco tipos de hepatitis, lo cual quiere decir que hay cinco cepas principales del virus que pueden causar la enfermedad (A, B, C, D y E) y tienen características distintas, aunque las hepatitis tipo B y el tipo C son la mayor causa de muerte y se han considerado más peligrosas porque están más relacionados con desenlaces como la cirrosis hepática el cáncer de hígado.

Fernando Fon también agrega una problemática fundamental y común para todos los tipos de hepatitis que es el tema del diagnóstico adecuado y oportuno.

María cuenta más de su primer diagnóstico, el cual buscaría confirmar posteriormente en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS):

“Me detectaron hepatitis C y sigo en tratamiento, cuando me dieron la noticia y me explicaron qué era, llegué a sospechar de mi esposo, por la infidelidad pero, no sé, también pienso que pudo ser el manejo que e dieron en clínicas anteriores que visité en mi desesperación por ser madre, recuerdo haber recorrido toda la avenida México en Neza, eran clínicas en las peores condiciones, no sé luego visito sus páginas de Face y me digo que fui muy tonta. Lo más seguro es que nunca sepa qué fue lo qué pasó realmente”.

 

Síntomas que comparten todos los tipos de hepatitis

Fon dice que afortunadamente se puede hablar ya de una cura para la hepatitis, la dificultad sería que los cinco tipos de hepatitis comparten síntomas, lo cual complica el diagnóstico y por ello, son necesarias pruebas complementarias para el abordaje integral:

"La hepatitis B, D y E son los tipos de hepatitis que se presentan más en los adultos y la hepatitis A, tiene mayor presencia en población pediátrica. La hepatitis B y la hepatitis C tienden a presentar cuadros crónicos, es decir, pueden estar presentes durante muchos años y sin síntomas".

Los síntomas de hepatitis más frecuentes y compartidos por los cinco diferentes tipos son:

- Fiebre

- Náuseas

- Vómitos

- Dolor abdominal

- Erupción cutánea

- Pérdida de apetito

- Ictericia (color amarillento en la piel o en los ojos).  Finalmente, María cuenta que ha sido un reto llevar la enfermedad en medio de la separación de su esposo:

“A veces pienso que ya no debería cuidarme, el doctor ya me dijo que sí hay cura pero la gente ya sabe que tienes la enfermedad y piensan que andas todo el tiempo contagiando y que no tiene cura, ahorita ya estoy haciendo los trámites para mi divorcio, no solamente es la infidelidad es también que te contagien algo”.

¿La cura de la hepatitis C?

Fernando Fon dice que los primeros tratamientos disponibles para la hepatitis mostraban una eficacia del 6%, es decir, seis de cada diez personas podían tener una respuesta positiva y ahora los tratamientos de primera generación muestran hasta un 96% de efectividad, es decir, 96 de cada 100 personas con hepatitis pueden curarse de la enfermedad si siguen su tratamiento por 12 semanas. El doctor refiere que la cura de la hepatitis con los tratamientos de última generación permite que la enfermedad desaparezca en la mayoría de los casos:

"Es un período relativamente corto de tiempo pero se debe asegurar que es el tratamiento adecuado para los pacientes, que necesita esa cura serológica que elimina el virus de la hepatitis C de la sangre de los individuos, lo cual habla de que se curó de la enfermedad que no antes y no hace mucho, no tenía cura o tratamiento lo suficientemente efectivo. La hepatitis B, por ejemplo, tiene una vacuna".

El doctor cuenta que el tratamiento para la hepatitis C más eficaz e innovador se encuentra disponible en las instituciones de salud pública:

“De hecho, recientemente hubo este anuncio por parte de las autoridades de salud, si no mal recuerdo, fue durante el último tercio del año pasado que se hizo esta inclusión. Ya había tratamientos anteriores, antivirales con 90% de eficacia y ahora tenemos los de mayor eficacia (94-96%). Ya disponemos de medicamentos de última generación para los pacientes que así lo requieran”.

Medidas preventivas generales y para la hepatitis C

Las medidas generales de prevención son la higiene adecuada como el lavado de manos, agua potable, adecuada disposición de excretas, evitar fecalismo al aire libre y garantizar la seguridad de la sangre para tranfusiones, sin embargo, en el caso de la hepatitis C, la OMS sugiere:

- Uso apropiado y seguro de las inyecciones en el entorno sanitario

- Manipulación y eliminación segura de objetos cortopunzantes y desechos

- Prestación de servicios integrales de reducción de daños para los consumidores de drogas inyectables, en particular mediante el suministro de material de inyección estéril y el tratamiento eficaz y de base científica de la dependencia

- Análisis de la sangre donada para detectar el VHB y el VHC (además del VIH y la sífilis)

- Prevención de la exposición a la sangre durante las relaciones sexuales, en particular con el uso sistemático del preservativo.

Hepatitis, problema de salud pública a nivel mundial que no debe olvidarse durante la pandemia 

Fon pide considerar a la hepatitis como un problema de salud pública a nivel mundial y que si bien por la relevancia de la pandemia, se ha prestado mayor atención al SARS-CoV2, los virus de la hepatitis son otro grupo de virus que afectan al hígado que también requieren atención:

“Los agentes que causan las enfermedades no se detienen como otras cosas que hemos podido disminuir por la pandemia, las enfermedades continúan su curso, aunque no sean tan visibles por la urgencia de covid, enfermedades como la hepatitis progresan y pueden generar desenlaces fatales; así como la pandemia de covid continúa cobrando vidas cada día en todo el mundo, las hepatitis víricas, también”.
 

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El doctor indica que el lavado de manos es una medida de prevención no solamente para la infección causada por el nuevo coronavirus, también puede ayudar a prevenir la hepatitis tipo A y la hepatitis tipo E que se contagian por problemas de higiene como la contaminación fecal- oral por alimentos o bebidas:

“La A y la E comparten como vías comunes de transmisión agua contaminada, alimentos contaminados y malos hábitos higiénicos, por ello, se recomienda un lavado adecuado de manos para romper el ciclo de contagio”.

Finalmente, el doctor Fon subraya la importancia de fortalecer el diagnóstico de la hepatitis, una enfermedad que puede asociarse con otras más graves y complejas, de consecuencias letales.