Se ha demostrado que las mujeres en estado de ebriedad quedan expuestas o vulnerables frente a hombres astutos. En California se aprobó una ley que señala que cualquier relación sexual debe ser consentida, y eso excluye toda respuesta que de una mujer tomada.
Un estudio confirmó que los varones saltan al acecho cuando ven a las féminas un poco alegres, pero lo que más preocupa es el tono agresivo que adoptan en ese abordaje.
Esto, que parece obvio y reprochable por el concepto sexista y negativo que hay detrás, fue revelado en una investigación realizada por el Centro de Adicciones y Salud Mental de la Universidad de Toronto.
Se demostró que las mujeres que toman alcohol en los bares son presas 'fáciles' de hombres con características de ser agresivos y que buscan sexo por una noche.
Los investigadores afirmaron que 90 por ciento de los incidentes hacia las mujeres en los bares se da en este contexto.
Kathryn Graham, directora el estudio, contó que para llegar a esta conclusión se realizaron mil 334 visitas a 120 bares y discotecas de Toronto durante dos años, donde se registraron mil 57 incidentes de agresión hacia las mujeres.
Comentó que las que estaban más embriagadas son vistas como blancos más fáciles o como objetivos menos capaces de resistir.
De acuerdo con la indagación, atacar a estas mujeres 'indefensas' hay menos probabilidades de que el agresor sea detenido o sufra consecuencias por sus acciones.
Por su parte, la doctora Jeanette Norris, investigadora científica del Instituto de Alcohol y Abuso de Drogas de la Universidad de Washington, estos tipo de hombres son los oportunistas extremos que tienen juicios negativos y despectivos sobre las mujeres que beben.
No se trata de ser paranoica ni responder con discursos feministas, sino tener un juicio real sobre los peligros a los que se expone una mujer cuando toma alcohol.
La mayoría de los incidentes comienzan como un acoso divertido e intencional, que se convierte en una agresión sexual y que es vista como diversión, satisfacción y entretenimiento entre los grupos de hombres.
Este comportamiento se debe al ambiente altamente sexual que tienen muchos bares, donde las agresiones sexuales son conductas aceptadas.
En los casos revisados el personal de los bares ni los comensales intervinieron en el momento de la agresión.
Kathryn Graham y Jeanette Norris llaman a que en los bares y locales nocturnos entrenen al personal para cuidar a las mujeres más vulnerables y con alcohol en el cuerpo (Con información de El Universal).