De acuerdo con Humberto Gómez Ruiz, especialista del Laboratorio de Química Analítica Ambiental, del Departamento de Química Analítica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), las envolturas de algunos alimentos, se relacionan con el desarrollo de un par de enfermedades: diabetes y cáncer.
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Por medio de una investigación, cuyo objetivo fue lograr que los plásticos empleados en el envasado o conservación de alimentos no contengan una peligrosa sustancia y que el manejo industrial no genere residuos que terminen en los cuerpos de agua, Gómez Ruiz explicó que el bisfenol A, suele encontrarse en contenedores de plásticos y recubrimientos de envases de alimentos y conlleva riesgos para la salud:
Afecta el sistema endocrino, eso significa cambios metabólicos como adelantar la menstruación en niñas y la posibilidad de generar diabetes y cáncer en el páncreas e hígado, pero debido a la falta de más datos con poblaciones expuestas no puede llegarse a algo concluyente.
¿Qué es el bisfenol A?
Se trata de un producto industrial que se emplea para fabricar resinas epóxicas y vidrios de policarbonato, así que también es emitido al ambiente por el desecho o mal manejo en las industrias productoras de estos plásticos.
¿Dónde se encuentra? El bisfenol A se encuentra en resinas epoxi y en plásticos de policarbonato que se usan de forma habitual en recipientes que almacenan alimentos y bebidas, por ejemplo, en las botellas de agua.
Por otro lado, las resinas epoxi se suelen utilizar en el recubrimiento de productos metálicos como tapas de botellas, conductos de suministro de agua, algunos selladores dentales y en latas de comida.
No es una investigación “de ahora”
El universitario también explicó que llevan años investigando sobre el tema:
Llevamos más de cinco años analizando el bisfenol A, y muchos más estudiando todos los contaminantes que son potencialmente riesgosos para el ser humano. En el ámbito mundial se han hecho investigaciones, pero con un número de muestras muy baja; quizá ésta sea una de las primeras con una población relativamente alta, abordada con mujeres.
Los resultados. Para encontrar la correlación entre el bisfenol A y el daño toxicológico, se tomó en cuenta una población de 500 mujeres, con controles como peso, edad, salud y si habían o no sido madres.
Se detectó bisfenol A en valores altos, en cinco por ciento de los casos, lo cual sugiere que cerca de 20 podrían desarrollar cáncer.
Por lo anterior, la recomendación de los especialistas es evitar el consumo frecuente de alimentos enlatados o temperaturas altas que pueden inducir a la liberación de la sustancia, tampoco se recomienda reutilizar demasiadas veces las botellas de agua.
Además, Gómez Ruiz también detalló:
Una estadística abierta proyectaría casi mil casos en el país de mujeres en edad reproductiva.
Conforme a lo anterior, también agrega que por medio de este laboratorio se encargan de procesar y analizar los compuestos químicos industriales, ambientales y en los seres humanos.
Finalmente el especialista de la UNAM también agregó:
Nuestra responsabilidad como universitarios es con la sociedad y con todo lo que podamos contribuir para su bienestar.