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Día Mundial Contra la Lepra: el estigma de una enfermedad casi extinta

La lepra es una enfermedad infecciosa crónica causada por el organismo Mycobacterium leprae, un bacilo acidorresistente con forma de curva.

Escrito en VIDA SANA el

La doctora Elsa Campos Díaz, académica y especialista en dermatología, recuerda en entrevista con SuMédico aquella ocasión en la que la encargada del departamento de neurología del Centro Médico Nacional “20 de Noviembre”, llamó a su jefa, la doctora Sagrario Hierro, por una chica a la que “le hemos hecho veinte mil pruebas y no sabemos el diagnóstico, pero le descubrimos unas lesiones en pierna, no sabemos qué tiene, sólo las lesiones y alteración neurológica en varias partes”. Tras una inspección no mayor a cinco minutos, la respuesta sorprendió a los presentes, el diagnóstico concluyente fue un caso de lepra indeterminada.

Día Mundial Contra la Lepra: enfermedad casi extinta con estigmas vigentes

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la lepra como una enfermedad infecciosa crónica causada por el organismo Mycobacterium leprae, un bacilo acidorresistente con forma de curva. Esta bacteria afecta la piel, los nervios periféricos, la mucosa de las vías respiratorias altas y los ojos.

Cada último domingo del primer mes del año, se conmemora el Día Mundial contra la Lepra, una enfermedad curable y poco contagiosa que a pesar de estas características carga un estigma que a pesar de los siglos no ha podido borrar. 

Castigo divino de la antigüedad

De acuerdo con una investigación de la Universidad de Tubinga en Alemania y la Escuela Politécnica Federal de Lausana (Suiza), la cepa actual de la lepra y la de esqueletos de la Edad Media comparten un ancestro en común, que coincide perfectamente con la evidencia ósea más antigua y comprobable de esta enfermedad, la cual pertenece a una momia de egipcia que data del siglo II a.C.

Conocida también como enfermedad de Hansen, la lepra ha sido citada desde en registros y libros muy antiguos, tan sólo en Éxodo 4:6-7, del antiguo testamento, se habla de cómo Moisés se “limpia de la lepra”:

“Le dijo además Jehová: Mete ahora tu mano en tu seno. Y él metió la mano en su seno; y cuando la sacó, he aquí que su mano estaba leprosa como la nieve. Y dijo: Vuelve a meter tu mano en tu seno. Y él volvió a meter su mano en su seno; y al sacarla de nuevo del seno, he aquí que se había vuelto como la otra carne”.
 

Al igual que esta narración, a lo largo de la historia de la humanidad, esta enfermedad se ha visto no sólo como un mal de salud, sino como un castigo divino que separa al portador de Dios, de la sociedad y la familia; además de contaminar y poner en riesgo de inmundicia a los que lo rodean.

Enfermedad de conquistadores

La historia de la lepra en México no es de reciente concepción, a pesar de que existen teorías que aseguran que la enfermedad de Hansen ya se encontraba de este lado del mundo desde antes de la Conquista, la mayoría de los investigadores y científicos defienden que fueron los colonizadores quienes la trajeron en el siglo XVI, argumentando que la mayoría de las embarcaciones provenían de regiones donde este ya era un gran problema de salud pública, tales como: Extremadura, Sevilla y Granada.

Años adelante, la lucha contra la lepra en México demuestra una gran intención por erradicar la enfermedad en la Nueva España y evitar que se les salga de las manos, por lo que, en 1572, cuando el número de enfermos ya era considerable surge “la figura ejemplar de Pedro López, médico español, que funda el Hospital de San Lázaro, refugio durante tres siglos de los leprosos de México”, narra el Dr. Fernando Latapí (1902-1989), fundador de la Escuela Mexicana de Dermatoleprología.

Erradicación de la lepra para el año 2000

“Debió haber sido allá de 1987, muy poquito antes de qué se terminará creando la vacuna contra la lepra, mi tío estuvo participando con el equipo encargado en Venezuela, durante los primeros años de los ochentas, era un tío hermano de mi mamá, investigador de Ciencias biológicas del Politécnico y miembro del Sistema Nacional de Investigadores”, narra en entrevista con SuMédico el periodista Humberto Fernández de Lara Quezada, sobrino del investigador y colaborador de la cura contra la enfermedad de Hansen, Fausto Pascual Quezada.

Durante más de 30 años el único tratamiento conocido contra este malestar fue la monoterapia a partir de la administración de dapsona, sin embargo, debido a su tiempo indefinido de administración y al riesgo de que la micobacteria generara resistencia, a finales de siglo pasado, el descubrimiento de fármacos como la clofazimina y la rifampicina dieron paso a la poliquimioterapia que hasta el día de hoy se aplica a nivel mundial.

Tal fue la efectividad de este nuevo tratamiento que en 1989 casi todos los países endémicos habían adoptado un mismo esquema sanitario, el cuál presentaba grandes resultados y un buen panorama a futuro, por lo que la OMS difundió a partir de ese año un eslogan que entre los estudiosos del tema resultaba muy poco realista: “Erradicación de la lepra para el año 2000”.

Lepra en el mundo

La doctora Campos Díaz explica que actualmente el tratamiento contra la enfermedad de Hansen, a nivel mundial, es administrado por la OMS, sin embargo, a pesar de que ya cuenta con un plan de erradicación a nivel mundial, parece ser que los estragos sociales que rodean a la bacteria de Hansen están muy lejos de este mismo objetivo.

Tan sólo a inicios de esta década, alrededor del mundo siguen vigentes 130 leyes que atentan contra los derechos humanos y civiles de las personas que padecen o padecieron lepra en algún momento de su vida, países como India, Singapur y Estados Unidos son lugares donde a esta población se le ve como una amenaza al bienestar nacional.

Dichos atentados van desde la segregación de portadores y ex portadores de la enfermedad hasta la negación de oportunidades laborales y comerciales de los mismos.

Actualmente, México cuenta con un protocolo de atención a los pacientes de lepra y atención en comunidades endémicas, dicho plan parte de la prevención y correcto diagnóstico de la enfermedad y pretende la erradicación a través de la aplicación del tratamiento de manera gratuita.

Hasta el año 2020, la incidencia de los casos de lepra en el país fue de 89 en todo el territorio nacional y a pesar de que se declaró una alerta esto no significó que hubiese riesgo de alto contagio, sino un protocolo sanitario para indicar que hubo más casos que en años pasados.

Lepra en México

De acuerdo con un informe publicado en octubre de 2020 por la Secretaría de Salud (Ssa), actualmente existen 18 entidades federativas de la República Mexicana con casos confirmados de lepra, en suma, alrededor de estos estados hay 89 pacientes con esta enfermedad; sin embargo, es importante destacar que el estado de Sinaloa concentra 32 de estos casos.

El listado preliminar, presentado por la institución, señala que 50 de los agraviados con esta enfermedad son hombres y 39 son mujeres, con un listado determinado por entidades de la siguiente manera:

Sinaloa 32 casos, Michoacán 15, Jalisco 6, Nayarit 5, Chiapas y Nuevo León 4, Yucatán, Guerrero y Colima 3, Tamaulipas, Quintana Roo, Guanajuato, Coahuila y Baja California 2, y finalmente, Aguascalientes, Oaxaca, Morelos y el Estado de México con 1.

Al respecto, Arturo Hernández Lima, Médico Residente de tercer año de medicina interna en el Hospital Carlos Macgregor Sánchez Navarro dijo a SuMédico:

“La lepra es una enfermedad extremadamente rara, ya que en la actualidad la prevalencia es de .31 casos por cada 10 mil habitantes”.

Hernández señaló que es raro encontrar con una persona con lepra y que los casos en México se encuentran en las zonas marginadas.

Síntomas de lepra

-Las lesiones cutáneas son las reacciones más frecuentes. Suelen ser más claras que el color normal de la piel.

-Pueden aparecer lesiones en la piel que no curan después de algunas semanas o meses.

-Adormecimiento de la piel debido al daño en los nervios debajo de la piel.

-Debilidad muscular.

“Rara vez los pacientes presentan fiebre como parte de la respuesta inmune, se considera que el 30 por ciento de los casos puede presentar dolor óseo”, señala Hernández.

Forma de contagio

Aunque no es muy contagiosa, la lepra se transmite por gotículas nasales y orales cuando hay contacto estrecho y frecuente con enfermos no tratados, explica también Hernández:

“La lepra se puede contagiar por contacto, pero también es importante ver que los pacientes que tienen liberación masiva de bacilos pueden adquirirla vía respiratoria. Si tú estás con ciertas supresiones en tus defensas y hay una persona con lepra que tenga liberación multibacilar importante puede entrar por vía respiratoria y puedes contraerla por este medio”.

Además, el doctor advierte que la lepra se puede transmitir por zoonosis, lo que significa que un animal puede transmitirte la enfermedad:

“Puede darse el caso que las personas se contagien por comer animales con lepra, en esta caso el armadillo es el animal que generalmente puede poseer la enfermedad”.

¿Quiénes se pueden contagiar?

La lepra afecta a personas de cualquier edad, pero es muy rara en niños menores de un año; no obstante, hasta el 20 por ciento de los casos corresponde a niños menores de 10 años. En la infancia, la lepra afecta por igual a ambos sexos, pero en los adultos predomina en los varones con una relación de 2:1.

Lepra puede generar lesiones graves en la piel

Si no se trata, la lepra puede causar lesiones progresivas y permanentes en la piel, los nervios, las extremidades y los ojos. La lepra es curable con un tratamiento multimedicamentoso.

“El tratamiento de la lepra se debe dar dependiendo del tipo y este puede durar de 6 a 12 meses o más de un año, dependiendo del tipo de lesiones que cause en la piel de las personas”, comentó Hernández quien agregó:

“En general puede haber daño en los nervios, porque afecta a la mielina que es la célula que los protege, puede haber deformación de tejido en el caso de la lepra tuberculoide o puede haber algunas pérdidas de cabello. En general las manifestaciones clínicas de la lepra son las lesiones en la piel, hay varias. Las primeras son unas lesiones que se ven como rojitas con el centro blanco y los bordes están como si fueran placas así como nódulos, como si fueran unas costras y estas se pueden dar en cualquier parte de la piel. En esta parte también se puede asociar pérdida de la sensibilidad o pérdida de control muscular y generalmente cuando esto ocurre se pierde el cabello o vello, son zonas que se ven pálidas y no tienen sensibilidad adecuada”.
 

Lesiones de la lepra se pueden manifestar de 6 meses hasta años después

“Las lesiones de la lepra se pueden manifestar de 6 meses hasta 10 o 20 años después  de que el paciente tuvo la exposición”, señala el médico Hernández.

Explica que en la actualidad son pocos los pacientes con lesiones tuberculoides que son las que generan bolas y deforman la piel.

¿Cómo prevenir la lepra?

“No hay una vacuna que prevenga de la lepra, sin embargo, la vacuna que se nos pone contra la tuberculosis al nacer puede tener cierta eficacia contra la lepra también, pero los estudios clínicos han sido muy variables y no se ha determinado como tal el porcentaje de eficacia, pero sí se sabe que hay cierta eficacia entre el 20 y el 80 por ciento, sobre todo si la aplicas al momento del nacimiento”, explicó Hernández.

(Con información de: OMS, Secretaría de Salud y El Sevier)